Adolescentes, moda y referentes

Relata un padre de familia.

Mi hijo de 17 años me dijo:

– Desde hoy, fumo.

– Te felicito, has tomado una buena decisión.

No le corté las alas. Luego busqué un video de 5 minutos sobre el cáncer de pulmón, se lo envié con una nota: Papá te ama.

Unos días después me dijo mi hijo:

– He dejado de fumar.

– Te felicito.

Un padre de familia le dijo al Papa:

– Tengo un hijo con confusión sexual.

– Escúchale-, aconsejó.

Y añade Claudio Barbut: Antes vas al tabernáculo, oras, ayunas y le pides ayuda a Dios: “Te pido por mi hijo…”, y estás al menos una hora allí, frente al sagrario.

En Montreal, un papá le dijo al P. Claudio Barbut:

– Mi hijo ha tenido tres intentos de suicidio, no quiere estudiar ni trabajar.

Di a Dios: “Padre dame la gracia del ayuno, de ayunar 40 días a pan y agua como lo hizo Jesús”, Jesús ayuna en ti, por eso puedes llevarlo a cabo, y verás milagros, pero has de estar en estado de gracia.

El día 35 del ayuno del papá, el joven saca su PC de su habitación y dice que no quiere esa máquina.

El día 36 decide ir a anotarse en una universidad.

El día 38 le dice: Quiero agradecerte lo que hiciste por mí. Quiero rezar contigo.

Jesús sana, libera, resucita todo.

“Soy hijo de Dios, libérame, sáname Señor. La creación sufre. Los desafíos son enormes”. “No estamos en una agonía sino en un parto” (Papa Francisco).

Hay que salir de la esclavitud del pecado. Dios está haciendo una nueva creación. Ponte de rodillas, ayuna. Los verdaderos profetas son de esperanza.

Una directora de un colegio dijo a un grupo de padres en una reunión de inicio de curso:

– Esto no es un desfile de modas. Las niñas vienen vestidas como si fueran a la playa. Enseñan todo lo enseñable e incluso más. Esto es un colegio. Venir al colegio se ha convertido, entre un grupo de niñas, en una especie de competición para ver quién es más atrevida y quién luce los modelitos más a la última, y eso no puede ser. O se moderan o pondremos uniforme.

Si nos detenemos a pensar, no se trata de una cuestión tan inocente como parece a primera vista, pues tiene causas y consecuencias muchos más profundas. Hasta cierto punto es normal que un adolescente intente provocar para llamar la atención, imite a sus compañeros o a sus cantantes favoritos o dé mucha importancia a su estética. Es muy importante para él, ser aceptado en sus ambientes más próximos.

A la vez ello le supone una perdida de seguridad y se cuestiona la autoridad paterna. Para llenar este vacío buscará nuevos referentes con los que identificarse y modelar su personalidad. Esta es una fase por la que todos hemos pasado y es necesario pasar.
El peligro está en los referentes con los que el joven se identifique, pues será donde extraiga los valores (o anti-valores) que regirán su vida adulta.

Unos padres que consigan inculcar valores a sus hijos como la generosidad, la valentía, el esfuerzo, o la perseverancia, sabrán realmente cómo van vestidos sus hijos fuera de casa, y no ansiaran la llegada del invierno.

La bendición de un padre o de una madre es unción; eso lo detesta el demonio.

Si un hijo quiere cambiar de sexo, dialoga con él, pero antes ayuna. Ayuno, oración y caridad, dice el P. Claudio Barbut.

Martha Morales

Las Adolescentes y la moda

En un lugar muy conocido se presentaron a concurso unas porras de diversos equipos de niñas. Excepto dos grupos, los otros seis destacaban por la falta de pudor. Una profesora preguntó:

– ¿De dónde sacaron la idea de vestirlas semi vestidas?

– De una de las madres de familia.

Las adolescentes son demasiado ingenuas y no miden lo que supone vestirse sin pudor. No conocen la psicología masculina.

Si a un hombre le gustas por el cuerpo, le gustas por lo más impersonal. Todos debemos fijarnos en la figura integral, cuerpo y alma. Un joven o una joven pueden tener una buena apariencia, y, a la vez, tener un carácter insoportable.

A la hora de convivir, lo que cuenta es la capacidad de comunicarse, de ser amable, respetuoso, abnegado, generoso y optimista.

Una chica llevaba un palmo de vientre al aire. “Visto así porque es mi manera de gritar que necesito que me quieran. Tengo hambre de cariño”, decía. Los seres humanos no queremos a los cuerpos sino a las personas.

Necesitamos crear espacios comunicativos humanos en los que nadie necesite presentarse como un objeto para atraer la atención, en los que nadie se animalice exhibiéndose como cebo para atrapar al depredador.

El famoso psicoterapeuta. Viktor Frankl, se pregunta: “¿Qué es en realidad el ser humano? Es el ser que siempre decide lo que es. Es el ser que ha inventado las cámaras de gas, pero asimismo es el ser que ha entrado en ellas con paso firme musitando una oración”. Y efectivamente, el hombre no vale por lo que tiene o por lo que es, sino por lo que decide, es decir, por el modo en que usa su libertad.

El tipo de mujer que un hombre prefiere revela el perfil de su alma. El modo de vestirse de una mujer refleja parte de su interioridad. Por eso, cuando el hombre se viste se cubre su cuerpo; cuando la mujer lo hace, descubre su alma.

En 1920, un grupo masónico interesado en acelerar la corrupción de los pueblos católicos, encontró la solución dando dos trayectorias: una era degradar a la mujer, y pensaron: ¿cómo se viste la mujer de la calle? ¡Hay que lograr que las mujeres se vistan así! Poco a poco se irán reblandeciendo las costumbres. La otra trayectoria era fomentar las prácticas, no las convicciones, para ello hay que buscar la distracción, el vacío, y que la gente joven busque llenarse con el placer para que adquieran una “mentalidad placentera”.

Sin embargo, todavía hay quienes no se dejan arrastrar por la corriente. Hace meses, unas jovencitas, cansadas de recorrer centros comerciales y sólo encontrar pantalones ceñidos con cortes al límite de la cadera, micro-blusas y «top tanks», en Arizona, lanzó una campaña para recuperar la ropa apropiada en las tiendas. Amanda Smith, de 18 años de edad, organizó la recolección de 1,500 firmas de adolescentes que, como ellas, piensan que vestir bien y a la moda no implica lucir como Britney Spears u otras artistas. Las adolescentes llevaron sus firmas hasta la cadena de tiendas Dillards en Mesa, Arizona, y para su sorpresa, esa empresa respondió a su demanda. Con la asistencia de las chicas, que han sido nombradas «consultoras de moda» de la tienda, la entusiasmada diseñadora de modas Jody Berman prepara ahora una línea de ropa sobria. Según Berman, se trata de atender a «un fabuloso mercado que no es atendido». La diseñadora sostiene que es un reto que disfruta porque cree que se puede hacer ropa muy bonita con un poco más de tela.

Hay un dicho que dice:

El bruto se cubre,

El rico se adorna,

El fatuo se disfraza,

El elegante se viste.

El magnetismo surge del buen gusto de quien que sabe elegir las prendas de su guardarropa. El vestido es como una segunda piel que prolonga la belleza del alma. El vestido habla de la interioridad de esa persona.

Con frecuencia la moda, lejos de fomentar la personalidad, nos hace masa, número. Son precisamente las que saben ser noblemente rebeldes, mujeres de una pieza, las que luego son punto de referencia para otras personas. Si saben custodiar su alma y su cuerpo, no serán una más: serán mujeres que saben distinguirse por su elegancia, por ser femeninas, pero sin trivializar la naturaleza. Lo mismo en la manera de hablar; no somos más mujeres por tener conversaciones que eran antes de soldados de caballería. No hay mayor denigración de la mujer que reducirla a cuerpo.

Decimos que una persona tiene mucho estilo cuando sabe aprovechar la ropa y los adornos, y comunicar elegancia, sencillez, naturalidad, etc. En cambio, de otras personas decimos que van a la moda, pero sin estilo. De aquí que puede triunfar una moda cuando es atractiva para la mayoría y cuando permite a los individuos expresar su manera de ser, con elegancia, a través de ella (Juana Castro).

El efecto bikini en la mente de los hombres

bikini1452046549797El ingeniero francés Louis Réard inventó el bikini. La primera vez que fue lanzado el bikini, ninguna modelo francesa se lo quería poner, así que tuvo que contratar una stipper. Antes de que Réard inventara el bikini las mujeres usaban trajes de baño completos o de dos piezas, pero no enseñaban el ombligo. Se le veía como una prenda sospechosa favorecida por escandalosos estilos mediterráneos. Las mujeres que usaban bikini eran expulsadas de las playas en los años 50.

En un estudio  se encontró que el cerebro de un hombre responde a una mujer con bikini como si estuviera viendo un objeto, no una persona. En otro estudio de Princeton, encontraron que los hombres que veían imágenes de mujeres con bikini, las asociaban con verbos de acción en primera persona como “yo empujo”, “yo tomo”, “yo lo manejo”. Pero cuando veían a una mujer vestida modestamente, la asociaban con verbos de acción en tercera persona, como “ella empuja”, “ella lo toma”, etc. Investigadores del National Geographic concluyeron que las mujeres con bikini inspiran a los hombres verlas como objetos, como algo que puede ser usado, en vez de verlas como alguien con quien se puede conectar. No hay mayor denigración de la mujer que reducirla a cuerpo.  ¿Cómo usas tu belleza? (Fuente: familias.com).

“Me encanta la vulgaridad, el buen gusto es la muerte, la vulgaridad es la vida”. Estas palabras de la diseñadora inglesa de moda, Mary Quant, que se hizo famosa por la invención de la minifalda y los shorts, ponen de manifiesto la revolución de la moda que comenzó en los años sesenta: la vulgaridad. Esta mentalidad es contraria a todo orden y disciplina, así como a toda prohibición.

Una chica llevaba un palmo de vientre al aire. “Visto así porque es mi manera de gritar que necesito que me quieran. Tengo hambre de cariño”, decía. Los seres humanos no queremos a los cuerpos sino a las personas.

Necesitamos crear espacios comunicativos humanos en los que nadie necesite presentarse como un objeto para atraer la atención, en los que nadie se animalice exhibiéndose como cebo para atrapar al depredador.

El famoso psicoterapeuta. Viktor Frankl, se pregunta: “¿Qué es en realidad el ser humano? Es el ser que siempre decide lo que es. Es el ser que ha inventado las cámaras de gas, pero asimismo es el ser que ha entrado en ellas con paso firme musitando una oración”. Y efectivamente, el hombre no vale por lo que tiene o por lo que es, sino por lo que decide, es decir, por el modo en que usa su libertad.

El tipo de mujer que un hombre prefiere revela el perfil de su alma. El modo de vestirse de una mujer refleja parte de su interioridad. Por eso, cuando el hombre se viste se cubre su cuerpo; cuando la mujer lo hace, descubre su alma.

El pudor perdido

mujeres-red_and_blue_dress_modern_lady_oilSi desnudarse fuera lo normal, la vergüenza sería antinatural, pero la vergüenza es un instinto de preservación de la intimidad, no un prejuicio adquirido.

La sociedad entera, antes tenía la percepción de que existía un límite. Ahora, la moda impone la falta de pudor. La novedad de nuestro actual contexto cultural es que nadie de avergüenza de llevar parte del cuerpo descubierto. La trasgresión ya no se considera la ruptura de un orden profundo, indispensable a nivel personal y social para conservar la propia fisonomía humana y evitar precipitarse en la animalidad. Al contrario, ahora se le ve como signo de intrepidez y rebeldía. Por otra parte, quien vive el pudor, es objeto de crítica e ironías.

Hay una secreta relación entre pudor y sexualidad ya que el pudor protege la intimidad del cuerpo. Hay que preguntarse si el pudor puede en verdad ser aniquilado.

“Una manifestación exagerada e indiscreta puede ocultar lo esencial. Lo advertimos cuando en determinadas circunstancias, un exceso de visibilidad acaba por hacer opaca a una persona o una situación” (Giuseppe Savagnone).

¿No sucede lo mismo con los sentimientos íntimos? Si se guardan en secreto o se confían a unos pocos, mantienen su significado. En cambio, revelados indiscretamente a cualquiera, se convierten en un objeto anónimo de curiosidad y de cotilleo.

Hay modos de exhibir la realidad humana que, en vez de revelar su sentido, acaban por banalizarla, y en consecuencia, por ocultar su verdad profunda. Sin misterio no hay revelación.

Justamente de esto nos defiende el pudor, porque es el temor a que, reducido a espectáculo, lo que hay de más íntimo y sagrado en nosotros se vuelva dramáticamente opaco, sea a los ojos de los demás o a los propios. En el pudor emerge la exigencia del ser humano de custodiar el misterio personal, contra las fuerzas que por todos lados tienden a vaciarlo.

El ser humano puede quedar desprotegido, a base de desproteger el pudor, en tres campos: el lenguaje, el vestido y la casa. A través de la palabra podemos dar a conocer nuestra intimidad al mejor amigo; a través del vestido cubrimos nuestra intimidad corporal de los ojos extraños. Cuando invitamos a una persona a nuestra casa, la invitamos de algún modo a nuestra intimidad.

Sólo esta capacidad de custodiarse hace posible el don de sí mismo. La pérdida del pudor lleva a ver a la persona como objeto.

Se ha hecho normal exhibir en la televisión vicisitudes personales, tragedias familiares o particularidades íntimas. No hay perversión, retorcimiento o vicio que no sea expuesto al público.

Cuando la moda desviste en vez de vestir, no es el cuerpo solamente un conjunto de células y tejidos orgánicos. En cada una de sus células y fibras, el cuerpo está empapado por el principio que lo hace humano.

La desnudez no es natural; en realidad, sólo los animales prescinden de vestidura, mientras que posiblemente no exista pueblo conocido, incluso en climas tropicales, que deje de cubrirse de algún modo. El cuerpo del varón y de la mujer es un misterio que pide ser custodiado y respetado. No hay mayor denigración de la mujer que reducirla a cuerpo.

El “impudor” se exhibe en la televisión, también en la morbosa presentación de escenas de violencia y sexo. Es el gran escaparate de la corporeidad desnudada y envilecida. Lo más terrible no es el intento que se ha llevado a cabo con varios programas, sino la reacción del público que se ha acostumbrado a ello. La imagen humana ha perdido toda referencia a su modelo; es decir, ya no parece imagen de Dios.

Esta imagen divina es la que, en definitiva, el pudor tiene como fin custodiar. Lejos de ser el último tabú de una mentalidad superada, el pudor es el signo indeleble de la altura, la amplitud y la profundidad que todo ser humano lleva consigo.

Cómo ser virgen a los 30

La venezolana Vivian Sleiman

Una candidata a Miss Venezuela escribe cómo ser virgen a los 30, y se convierte en best-seller

Actualizado 7 enero 2012

Juan Antonio Ruiz LC/ReL

Vivian Sleiman es una joven venezolana de origen libanés, que ha convertido en bestseller el relato de su vida. Una historia que tiene como título un reto que, a primera vista, parecía llamado al fracaso: Virgen a los treinta. Y, sin embargo, sus libros son preferidos por las adolescentes de su país mucho más que al mismísimo Harry Potter. ¿Cuál es el secreto de su éxito?

Ante todo, conviene subrayar que Vivian no es fea. Alta y espigada (mide 1,79 metros), de piel blanca y cabello negro, se presentó al concurso de Miss Venezuela en el 2001, teniendo como talla los famosos 90-60-90. Era favorita… pero no ganó. ¿La razón? Se retiró cuando uno de los sujetos del jurado quiso llevársela a la cama como condición para alzarse con la corona.

En un artículo aparecido en el diario español ABC -en donde también aparece la dramática historia de su familia- Vivian reveló que tardó sólo cuatro meses en escribir su libro: «Escribirlo fue para mí una catarsis». Y es que su sencillo relato lo presenta desde el palco de quien quiere «preservar la virginidad hasta encontrar el amor verdadero».

Y no es que Vivian no sienta nada. Para los suspicaces, aclara: «Si no me he entregado a ningún hombre, no es porque sea frígida, ni tampoco porque no sea capaz de sentir; no, soy una mujer apasionada, con la hormonas siempre a flor de piel, que siente con mucha intensidad (a veces creo que el doble) las cosas normales del día a día». 

Sólo que tomó la decisión de permanecer virgen, no por obligación, sino por convicción, hasta que llegue el momento: «Nunca me planteé llegar así a los treinta, pero son vicisitudes que suceden en la vida. Yo me he preguntado mucho si, en pleno siglo XXI, el mundo está equivocado o yo estoy equivocada. Como mujer me he sentido frustrada en muchas ocasiones. Hoy día me siento fortalecida, me siento bien, no me siento ni mejor ni peor que otras, simplemente soy yo, Vivian Sleiman».

Su testimonio es un oasis en medio de una Venezuela líder en embarazos prematuros, un país donde es frecuente que las niñas de doce y catorce años hayan perdido la virginidad, o donde las muchachas venden en internet su primera vez por miles de dólares. 

De hecho, Vivian está dispuesta a dar charlas en los colegios y escuelas para sensibilizar y educar a las adolescentes sobre su experiencia virginal.

De Berlusconi a Medjugorje

La polaca Ania Goledzinowska, una de las caras de Chanel

De cantar «happy birthday» en bikini a Berlusconi a vivir en un convento de Medjugorje

«Yo nunca he sido tan feliz como lo soy en Medjugorje, y pretendo seguir aqui porque me siento amada por Dios», explica la ex top model.

Actualizado 28 septiembre 2011

Vatican Insider

La top model polaca Ania Goledzinowska, novia de Paolo Enrico Beretta (sobrino de Silvio Berlusconi) dejó
Italia hace tres meses para retirarse en el convento de la localidad mariana de Bosnia-Herzegovina y para dedicar su vida a la oración. Fue una de las caras de Chanel, la que en la fiesta de cumpleaños de 2008 de Berlusconi salió de un “regalo gigante” en bikini para cantar “Happy birthday” al presidente italiano.

Su vida cambió de la noche a la mañana

Pero Ania Goledzinowska sufrió una conversión radical («tenía una especie de alergia por los sacerdotes y por la Iglesia», durante un viaje a Medjugorje. La ex top model, en una entrevista con el Catholic Herald inglés, cuenta que nunca había sido verdaderamente feliz y que sufrió un periodo de depresión.

«Tenía una vida privilegiada que ya no me gustaba, quería cosas simples, normales, hasta que una mañana llamé a un amigo y le pedí que me ayudara a regresar definitivamente a Medjugorje, de lo contrario me habría arrojado por la ventana: me fui de Italia con dos maletas y din decirle nada a nadie». Era el 25 de junio, a pocas horas del vuelo previsto hacia Cerdeña, en donde Ania tenía una cita en un programa de televisión; era el 30 aniversario de la aparición de la Virgen de Medjugorje.

«Ahora vivo en una comunidad mariana con sacerdotes y monjas, me despierto a las cinco, rezo el Rosario mientras subo el monte Podbrdo y luego vuelvo para asistir a misa, explica.

Ofrezco mi ayuda a las hermanas para limpiar las habitaciones y los baños, planchando y cocinando. También tenemos un huerto y gallinas. Descanso por la tarde y a las siete continuamos con las oraciones. Muchos de mis amigos no entienden esta decisión, pero yo nunca he sido tan feliz como en estos tres meses y pretendo permanecer aquí, porque me siento amada por Dios y satisfecha por lo que hago».

Ninguna nostalgia por las “fiestas exlusivas” ni por la ropa elegante: «Uso los “hábitos de la Providencia” que dejan aquí los peregrinos».

Su novio quedó muy sorprendido por su decisión

Su novio, «al principio le afectó mucho la decisión que tomó, durante dos semanas no supo en dónde estaba, nos vimos después de un mes, cuando decidí que me mudaría definitivamente a Medjugorje, y dijo que me entendía: durante tres años fue el único hombre que me respetó siempre». Sobre el “Happy birthday” para Berlusconi se limita a decir que «después de Medjugorje, hay muchas cosas que no volvería a hacer. Jesús salva a los pecadores como yo».

La ex modelo ahora trabaja en la asociación “Corazones puros” para aquellos que viven en castidad hasta el matrimonio.

La señal para reconocerse: «anillos numerados».

Y observa, sobre tantas conversiones de los “Vip” en Medjugorje, que «algunos lo hacen para obtener publicidad», pero «también están los que necesitan verdaderamente respuestas». Está convencida de que «el mundo de hoy esté buscando la verdad, porque vivimos en una falsa realidad». Una batalla contra «gente falsa, molestias, abusos, drogas y muchas otras cosas».

Considera que tuvo «que vivir cosas malas en el pasado para poder dar hoy el testimonio de que se puede cambiar y que la vida real es algo diferente». Se define como «la primera de las pecadoras» y ahora «no quiere perder el don de gozar la gracia de Dios».

Enseñar a las chicas el valor de la modestia y la castidad

Concursante en «America´s Next Top Model»

Una «Modelo Top» deja el glamour para enseñar a las chicas el valor de la modestia y la castidad

La bella Leah Darrow deja una exitosa carrera en Nueva York para «no perder» su alma y dice que mucho del modelaje es «deshumanizante».

Actualizado 22 enero 2011

Kathleen Gilbert/Notifam

Leah Darrow, la hija mayor de una familia profundamente católica del sur de Estados Unidos, contó en un reciente artículo publicado en el National Catholic Register que su epifanía se produjo cuando un día le dijeron que vistiera una ropa muy provocativa en una sesión de fotos para una revista internacional. A pesar de su incomodidad, ella consintió, diciéndose a sí misma que sólo era un trabajo.

Pero después llegó lo que ella llama un momento de gracia, justamente antes que se sacaran las últimas fotos: de repente tuvo una visión de ella misma, mirando a Dios cara a cara después de la muerte, y no teniendo nada para mostrar de su vida.

“Yo sabía que en la forma en que estaba viviendo, no estaba siendo auténtica con mi fe”, recordó ella. Se fue a su casa de Nueva York, llamó a su padre y le dijo: “Si no vienes a buscarme, voy a perder mi alma”. El manejó desde St. Louis para recogerla.

Eso fue suficiente para impulsarla por un nuevo camino. Ahora la joven mujer, alguna vez concursante en la popular serie “America’s Next Top Model”, ha abandonado una glamorosa carrera para dedicarse a un trabajo de tiempo completo en el que transmite a las niñas su visión respecto al valor de la virtud quizás menos valorada de todas: la castidad.

“Aunque no todo el modelaje es malo, mucho de él es deshumanizante. La dignidad de la persona tiene pequeña importancia”, explicó ella. “Sólo eres un cuerpo. También es muy importante a qué fiestas vas y con quien estás. Mucha gente está triste en la industria, aunque lo disimulan. Se supone que sólo haz de hacer tu trabajo, ser una profesional”.

La modestia es «bastante atractiva»

Ella dice que la modestia no es sólo una cuestión del vestir, sino también de discreción en aquellas cosas como el discurso y las emociones.

Dijo que “la modestia es más que simplemente la longitud de una falda”. “Tiene que ver con nuestras conversaciones, sobre cómo tratamos a la gente y sobre cómo amamos a los otros”.

“La modestia protege nuestra pureza y el misterio de una persona. En nuestra sociedad, tiene mala fama, pero en realidad es bastante atractiva”.

Darrow, quien está cursando un Master en teología pastoral en la Universidad Ave Maria, dice que descubrió su trabajo al extender su mano a jóvenes chicas agridulces. “Cuando hablo, usualmente tengo chicas que vienen a mí, llorando y diciendo ‘he perdido mi virginidad’. Esto me rompe el corazón. Es por eso que he dedicado mi vida a ser una defensora de las mujeres”, dijo.

 

«AHORA QUIERO SER SANTA»

AMADA ROSA PÉREZ: «AHORA QUIERO SER SANTA»

Una ex modelo sorprende al mundo con su conversión tras abortar e intentar suicidarse


Tras su exitoso paso, hace ya unos cinco años, por las pasarelas europeas y diversas producciones para la televisión, Amada Rosa Pérez, desapareció de la escena pública sin dejar rastro alguno. Hace poco ha vuelto, pero esta vez no para deslumbrar a hombres y mujeres con sus atributos físicos y su encanto personal sino para dar testimonio de su conversión después de haber abortado e intentado suicidarse.

Actualizado 26 mayo 2010

R.R./ReL

Amada Rosa Pérez llegó a ser una de las modelos de pasarela más cotizadas del país pero hace cinco años desapareció de la escena pública sin dejar rastro. Hace unas semanas volvió a ser noticia al compartir su testimonio de conversión en una entrevista concedida al diario El Tiempo.

Amada confesó que padeció una enfermedad que le quitó el 40 por ciento de la audición en el oído izquierdo y empezó a cuestionar toda su vida. «Me sentía inconforme, insatisfecha, sin rumbo, sumergida en satisfacciones pasajeras, pero siempre buscaba respuestas y el mundo jamás me las dio», indicó.

«Antes era una persona afanada, estresada, me alteraba fácilmente. Ahora vivo en paz, no me afana el mundo, disfruto cada momento que me ofrece el Señor. Voy a Misa y rezo el Santo Rosario diariamente, al igual que la coronilla de la Divina Misericordia a las 3:00 p.m. Me confieso con frecuencia ante un sacerdote», agregó la colobiana, informa ACI.

Ahora se llama Amada Rosa de Jesús y María, es devota de la Virgen y una activista incansable de la comunidad religiosa Lazos de Amor Mariano.

Amada afirma que «ser modelo significa ser un punto de referencia, alguien cuyas actitudes son dignas de reproducir y yo me cansé de ser una modelo de superficialidad. Me cansé de un mundo de mentiras, apariencias, falsedad, hipocresía y engaños, una sociedad llena de antivalores, en la que se resalta la violencia, el adulterio, la droga, el alcohol, las peleas, un mundo que exalta las riquezas, los placeres, la inmoralidad sexual y el fraude».

«Quiero ser modelo de promoción de la verdadera dignidad de la mujer y no de su utilización comercial», concluyó.

Aborto y suicidio

Hablando de los detalles de su conversión, esta vez con la cadena Caracol, la joven de 33 años dijo que tuvo que tocar fondo para re-encontrarse con ella misma.

Un aborto y un intento de suicidio, fueron dos de las razones por las que decidió buscar el cambio. «Yo aborté y eso marcó mucho mi vida por eso estoy acá compartiendo mi testimonio».

Sobre los motivos que tuvo para tomar esas decisiones, Pérez dijo, «uno siente que la vida se le viene encima, que no va a poder con esto, no sentía apoyo y se siente uno solo. Me hacía falta amor, comprensión y apoyo».

Vea el vídeo en el que Amada Rosa Pérez relata su conversión:

El Rosario, fuente espiritual

EL ROSARIO ES SU FUENTE ESPIRITUAL

«Ahora quiero ser santa», dice la ex modelo Amada Rosa Pérez


La que llegó a ser una de las modelos más cotizadas del país, que se paseaba por las pasarelas de Miami, Milán y Venecia desapareció, como si se la hubiera tragado la tierra. Sucedió hace 5 años. Quienes la buscaban para saber qué había pasado se encontraban con la misma respuesta: «Ella se volvió beata».

Actualizado 22 febrero 2010

Martha Morales/El Tiempo.com

En el 2009, Amada Rosa Pérez reapareció en un evento público en Medellín, con la misma timidez del principio, cuando quería ser modelo. Pero ya era otra: había sufrido una enfermedad que, poco a poco, le quitó el 40 por ciento de la audición en el oído izquierdo, se había convertido en una devota de la Virgen y una activista incansable de la comunidad religiosa Lazos de Amor Mariano. Incluso, se había cambiado de nombre: Amada Rosa de Jesús y María. Vive en Bogotá, sola, o como ella dice, con Dios y la Virgen, y reza uno o varios rosarios durante el día.

– ¿En qué trabaja ahora?

– Estoy haciendo un catálogo de artículos religiosos.

– ¿Qué pasó con la moda?

– Ser modelo significa ser un punto de referencia, alguien cuyas actitudes son dignas de reproducir y yo me cansé de ser una modelo de superficialidad. Me cansé de un mundo de mentiras, apariencias, falsedad, hipocresía y engaños, una sociedad llena de antivalores, en la que se resalta la violencia, el adulterio, la droga, el alcohol, las peleas, un mundo que exalta las riquezas, los placeres, la inmoralidad sexual y el fraude. Quiero ser modelo de promoción de la verdadera dignidad de la mujer y no de su utilización comercial.

– ¿Cómo empezó la transformación?

– Lentamente, por obra y gracia del Espíritu Santo. Empecé a cuestionar toda mi vida: me sentía inconforme, insatisfecha, sin rumbo, sumergida en satisfacciones pasajeras, pero siempre buscaba respuestas y el mundo jamás me las dio. Empecé a sentir una fijación por las camándulas; las usaba como accesorio. Recuerdo que estuve en Egipto, en la iglesia, y tuve una sensación de profunda paz y amor. Me di cuenta de que llevar puestas las camándulas no tenía ningún significado, entonces comencé a rezar el rosario a diario y volví a sentir esa paz.

Antes era una persona afanada, estresada, me alteraba fácilmente. Ahora vivo en paz, no me afana el mundo, disfruto cada momento que me ofrece el Señor. Voy a misa y rezo el santo rosario diariamente, al igual que la Hora de la Divina Misericordia a las 3 pm. Me confieso con frecuencia ante un sacerdote.

– ¿Por qué cambió su nombre?

– Cuando me bautizaron, era Amada Rosa Pérez Pérez. Después de conocer el amor de Dios me di cuenta de que era Amada Rosa de Jesús y María.

– ¿Cómo ve ahora ser modelo?

– Creo que detrás del maquillaje, las luces y las pasarelas, muchas veces se esconden vidas profundamente vacías y tristes.

– ¿Es divertida su vida ahora?

– Algunos pueden pensar que estoy loca… Bueno, la locura de Dios es más bella que la sabiduría de los hombres.

– ¿Se considera una beata?

– Si por beata se entiende a una amargada, gruñona y aislada, entonces no soy beata. Si por querer ser santa recibo ese título, entonces que me llamen como deseen. Solo busco y lucho por la santidad.

MARTHA MORALES M.
REDACTORA DE HOY

La calvicie es bella

volver a nacer

Con ocasión de su participación en el Congreso “Lo que verdad importa” han salido varias entrevistas sobre esta mujer.

Sharon Blynn, modelo y escritora, regresaba a casa para visitar a sus padres sharonblynnantes de volver a Nueva York, donde había trabajado y estudiado los últimos años.

Un día antes de coger el avión a Nueva York ese dolor de estómago que le llevaba dando la lata un tiempo se hizo más fuerte. No pudo marcharse. Ya en el hospital de Florida le fue diagnosticada una dolencia gastrointestinal que, tras una nueva serie de pruebas, se convirtió en una extraña forma de cáncer de ovarios.

“Cuando oí la palabra maligno mi primer pensamiento fue: Dios mío, voy a morir. Después de mi diagnóstico vinieron tres años de operaciones y quimioterapia, y más tarde el inimaginable dolor de comprobar, un año después de haberme dicho que estaba curada, que el cáncer había vuelto”. Sharon Blynn experimentó el miedo y la ansiedad que suponen enfrentarse a una enfermedad que puede ser letal. Sintió que todo su mundo se desplomaba, “como si de repente viviera la vida de otra persona”.

Pero en el dolor encontró una fuerza que nunca había imaginado. “Dicen que el dolor es el mayor motivador, y en mi caso no pudo ser más cierto. Estos años pasados han sido los más positivos y de conocimiento personal que he tenido nunca. Evidentemente, si me hubieran dado a elegir, habría preferido que me dejaran en medio de la nada sin agua ni alimento para conocerme a mí misma antes que afrontar un cáncer, pero no siempre podemos elegir, ¿no?”, explica Sharon.

De aquel viaje por la enfermedad no sólo se llevó una victoria (hoy está curada), sino también “pasión y alegría de vivir; una que nunca antes había tenido”. Pero Sharon también conoció un mundo de sufrimiento y vergüenza que estaba más allá del cáncer.

-¿Cómo ha cambiado su vida su enfermedad?

Mi enfermedad me ha dado una energía renovada, pasión y una perspectiva de vida. He dado prioridad a un estilo de vida saludable mental, corporal y espiritualmente. He aprendido a amar, a cultivar mi vida día a día y a perseguir mis metas disfrutando cada momento.

“Me encontré con muchas mujeres hundidas por la caída del pelo y otros cambios físicos que provoca la lucha contra el cáncer”. Por eso, Sharon Blynn, una mujer joven y guapa, decidió hacer de la calvicie un signo más de belleza.

Una belleza distinta, pero igual de femenina. “Ninguna mujer debería disimular su calvicie, sino reinventar su belleza”.

Y en eso está Sharon, en enseñar una belleza que nazca desde el interior, fruto del bienestar personal. A través de su organización Bald is Beautiful [La calvicie es bella], de conferencias a lo largo y ancho del mundo y de su trabajo como modelo, Blynn cautiva allá por donde pasa.