Liberarse de la masturbación

A salto de mata

Me gusta que haya testimonios en X de hombres que animan a vivir la pureza y dejar el vicio de la lujuria. Esta mañana me he encontrado con este:

De entre las respuestas @Ronald275778223 hace la clásica pregunta:

Quisiera saber donde dijo Dios textualmente q masturbarse es pecado? O es la Iglesia quien lo dice???

Y contesto

@plucenamolina

La masturbación es un acto contra la pureza de corazón de la que habla Jesús tantas veces, como por ejemplo en Mt 5, 28: “Habéis oído el mandamiento «no cometerás adulterio». Pues yo os digo: el que mira a una mujer casada deseándola, ya ha sido adúltero con ella en su interior”.

Dice el Catecismo de la Iglesia Católica:

“Las ofensas a la castidad

2351 La lujuria es un deseo o un goce desordenados del placer venéreo. El placer sexual es moralmente desordenado cuando es buscado por sí mismo, separado de las finalidades de procreación y de unión.

2352 Por masturbación se ha de entender la excitación voluntaria de los órganos genitales a fin de obtener un placer venéreo. “Tanto el Magisterio de la Iglesia, de acuerdo con una tradición constante, como el sentido moral de los fieles, han afirmado sin ninguna duda que la masturbación es un acto intrínseca y gravemente desordenado”. “El uso deliberado de la facultad sexual fuera de las relaciones conyugales normales contradice a su finalidad, sea cual fuere el motivo que lo determine”. Así, el goce sexual es buscado aquí al margen de “la relación sexual requerida por el orden moral; aquella relación que realiza el sentido íntegro de la mutua entrega y de la procreación humana en el contexto de un amor verdadero” (Congregación para la Doctrina de la Fe, Decl. Persona humana, 9).”

Bastantes autores católicos de manuales de teología moral o no son claros o dicen que la masturbación no es pecado. En concreto, la Santa Sede condenó el manual de Marciano Vidal “Moral de actitudes” por su grave desviación en la enseñanza sobre la virtud de la pureza de corazón.

De este disenso moral contra la encíclica Humanae vitae de San Pablo VI vienen los lodos de la falta de confesores y de vicios lujuriosos del clero y los religiosos en los años de contestación al Magisterio. El Papa Benedicto XVI denunció a la revolución sexual del 68 como causa de la pederastia mundial y dentro de la Iglesia. Lo hizo en un artículo publicado en la revista mensual Klerusblatt dedicada el clero católico en Baviera con el título “La Iglesia y los abusos sexuales” en abril de 2019.

En el fondo es una cuestión de virtud personal. El impulso sexual, como todos los demás impulsos o tendencias personales hay que integrarlos en una personalidad abierta hacia el don de uno mismo en vistas del bien de los demás. El sexo no se puede orientar hacia el yo egoísta.