Un plan de la Nueva Era

Nuestro Señor a Alicja Lenczewska , 23 de mayo de 2002

LA ESTRATAGEMA DE LOS SECUACES DE SATANÁS

El objetivo de los secuaces de Satanás activos en el mundo es engañar a tantas almas como sea posible y arrojarlas al abismo del Maligno. Su actividad abarca todas las esferas de la vida humana desde el nacimiento hasta los últimos momentos en este mundo. Afecta a todas las creaciones de Dios, con el fin de destruirlas, distorsionarlas y arrojarlas ante Lucifer, deseosas de poder y venganza sobre Dios y Sus creaciones.

Yo uso el Amor y la Verdad, que soy, y conduzco hacia la unidad. Mi enemigo emplea el odio y la falsedad. Por lo tanto, es necesario revelar a Mis hijos elegidos los principales aspectos y manifestaciones de la actividad del Maligno. San Pablo dijo que la lucha principal desde el principio del mundo se había librado en el nivel de los elementos espirituales. La actividad externa del mal está dirigida a someter a las almas humanas, a las que se les ha dado vida eterna y están destinadas a vivir en Dios. La vida en la tierra es una preparación para la vida eterna y también una libre elección de la calidad de esa vida en unidad, ya sea con Dios o Satanás.

Yo uso el Amor y la Verdad, que soy, y conduzco hacia la unidad. Mi enemigo emplea el odio y la falsedad, que son el núcleo de su ser, y conduce hacia la discordia. Por lo tanto, debes ponerte toda la armadura espiritual que San Pablo menciona (Efesios 6:10-18) y desechar todo lo que tiene tanto como la apariencia del mal.

Las esferas de la vida que particularmente son atacadas son el corazón, la mente y el cuerpo. El corazón es atacado por el orgullo, la vanidad, la crueldad, el miedo, el rechazo de la espiritualidad, la crudeza y el egoísmo. La mente es acosada por la necedad, la superficialidad, las ilusiones, la falsedad, la desconfianza y la ignorancia. El cuerpo es asaltado por la creencia de que es el valor supremo. El cuerpo de una mujer está particularmente expuesto al ataque debido a su comercialización y la convicción de que es una fuente de placer.

La actividad de Satanás cubre:

1. Cultura y arte (música, bellas artes, literatura), moda, intereses, estilos de vida y jerarquía de valores (materialismo).

2. Religión: es reemplazada por religiones paganas** en última instancia, destinadas a introducir el culto a Satanás, servido por sectas, supersticiones, ocultismo, magia, etc. y el satanismo como el culto del llamado dios bueno que es Lucifer.

3. Condiciones sociales: el control y la esclavitud de las personas, el globalismo, la manipulación de la conciencia, la pobreza generalizada, las élites de poder y riqueza, el saqueo. La deificación del hombre, de sus poderes, y su usurpación del derecho a decidir sobre la vida (creación y destrucción), el bien y el mal. Además, la obra de Satanás se ve en la deshumanización del hombre al despojarlo de la dignidad de hijo de Dios, por la humillación, la degradación, la glorificación de los animales, la manipulación y el sadismo.

El objetivo es el llamado nuevo mundo, la Nueva Era, construido sobre principios que son opuestos a la ley natural y divina, tener un gobierno mundial totalitario, haciendo uso de las tecnologías modernas. Este es el llamado nuevo orden establecido por la Iglesia de Satanás.

Los frutos son visibles incluso para personas bastante irreflexivas, aunque se lleva a cabo un trabajo sistemático para disminuir la sensibilidad de las personas, aumentar la indiferencia y profundizar la sensación de impotencia, para que las personas se acostumbren a la perversión, el mal y la crueldad y lo consideren todo normal o incluso un signo del «progreso de la civilización». Este es el engaño al por mayor de las personas y empujarlas a las garras de Satanás o incluso hacerlas dirigirse allí ellos mismos. Ustedes, mis hijos fieles, están llamados a la victoria Conmigo y a la Virgen María, a la participación en la renovación de la faz de la tierra y a Mi triunfo en las almas humanas, gracias a su confianza y entrega heroica.

REFLEXION SABIA DE UN CRISTIANO PENSANTE

unidoscontralaapostasia

Llamado Soel Osorio

Hay una Atmosfera de milagros en este momento, hahahahaha…Cuando se expresó así alguno de los Apóstoles de Jesucristo, cuando, NUNCA.

Porque este lenguaje de atmosfera conquista y similares no proviene de las Sagradas Escrituras sino de la Nueva Era, de la Metafísica, de los Kriyas, del Kundalini, de la Cinsiología y de muchas otras corrientes que se infiltraron en el Cuerpo de Cristo, y que ahora la mayoría usan estos términos, siendo incorrecto esta manera de hablar.

Imagínense al Apóstol Pedro delante del paralítico en el Libro de los Hechos de los Apóstoles diciéndole: Siento una Atmósfera de Milagros en este momento, recibe el tuyo, hahahahahaha; nunca lo hizo así, en vista que el predicaba el Verdadero Evangelio en Palabras y en el Poder del Espíritu Santo, y no el que ahora se predica, el cual ha sido cambiado por corrientes externas volviéndolo místico y casi mágico.

«Con yoga y mindfulness autorizas a los demonios a que se hagan cargo», advierte un exorcista

Javier Luzón, sacerdote desde 1980, es profesor de Antropología Teológica en Madrid y fue durante años exorcista de la diócesis de Madrid. Ha participado en el ministerio de liberación desde mediados de los años 90, en miles de intervenciones. Es también autor del libro Las seis puertas del Enemigo. Experiencias de un exorcista (www.lasseispuertas.com).

En su canal de YouTube «Tiempo de Respuestas» lamenta que en lugares cristianos -y otros que no lo son- se ofrezcan sesiones de yoga y mindfulness, incluso a niños, porque, en su experiencia como exorcista «puede haber como un beneficio inicial, pero luego vienen los problemas».

El padre Luzón declara que con el yoga y el mindfulness, con sus técnicas de «distanciarse del yo», «estás autorizando a los seres espirituales, que ellos llaman energías pero son las personas angélicas caídas, los demonios, a que se hagan cargo de tu personalidad».

«Mindfulness significa atención plena, es concentrarte en tus sentimientos para distanciarte de ellos. Claro, en un primer momento, sientes una euforia, porque te quitas también los sentimientos negativos. Pero luego, al distanciarte de tu ‘verdadero yo’, se te puede meter vete tú a saber quién», avisa.

«Recuerdo de una persona que me trajeron del Reino Unido, que era un zombi. Era una mujer joven y era un zombi. Lo primero que hubo que hacer era echarle al demonio mudo, ella no podía hablar. Cuando ya pudo hablar explicó que al principio tuvo una gran euforia, pero luego se le secó el corazón. ‘Dejé de sentir nada’. Y luego se le bloqueó la mente. Porque si tú te distancias de tu yo estás autorizando a los seres espirituales, ¿verdad?, que ellos llaman energías pero son las personas angélicas caídas, los demonios, a que se hagan cargo de tu personalidad y puedes tener un muy serio problema, como de hecho he comprobado».

«Ahora mismo, en tantísimos colegios, a niños, en tantísimas instituciones sanitarias, están ofreciendo el Mindfulness, o el yoga, o estas prácticas como técnicas de terapia, de sanación, sin darse cuenta de que puede haber como un beneficio inicial, pero que luego vienen los problemas», previene.

Diferencia entre la oración cristiana y las prácticas orientalistas

El padre Luzón explica además la diferencia entre la oración cristiana y las prácticas orientalistas. «Un cristiano es alguien que habla con Dios, porque Dios es un ser personal, no es una energía universal como piensan los que están metidos en estas cuestiones. Además, la oración es dialogar con Alguien que te habla, escucharle, referirte a Él, es un diálogo interpersonal, cosa que no sucede en la meditación zen, donde se trata de vaciarse de todo pensamiento, de todo sentimiento, para irse identificando, diluyendo, en una especie de nirvana, diluirte en la energía universal».

«Para un hinduísta o budista la felicidad, la mejor manera, es no tener sentimiento, la anulación del yo, porque si tienes sentimientos te vas a frustrar y lo mejor, dicen ellos, es no tener ningún sentimiento. Y claro, eso es diabólico en el fondo. Porque lo que quiere Dios de nosotros es que despleguemos nuestro corazón, nuestra felicidad, no que lo anulemos.Ese es el gran peligro», advierte.

«Todas estas prácticas de relajación, de ejercicios de respiración, de posturas de deidades hinduístas y que se está invocando a esas deidades, muchas veces sin saberlo, son dos momentos de ese proceso de 8 pasos para la anulación de la persona, para alcanzar el nirvana, que es esa ataraxia, esa anulación de sentimientos en que, dicen ellos, supuestamente, te sientes feliz. Pues eso es incompatible con la fe», insiste.

Orationis Formas y las posturas corporales al meditar

El padre Luzón recomienda leer el documento «Orationis Formas: Carta a los obispos de la Iglesia Católica sobre algunos aspectos de la meditación cristiana», publicada en 1989 por obra del cardenal Joseph Ratzinger con aprobación del Papa Juan Pablo II.

Esa carta incluye varias reflexiones sobre el uso del cuerpo en la oración: reproducimos algunas.

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«La auténtica mística cristiana nada tiene que ver con la técnica: es siempre un don de Dios, del cual se siente indigno quien lo recibe».

«En la oración, el hombre entero debe entrar en relación con Dios y, por consiguiente, también su cuerpo debe adoptar la postura más propicia al recogimiento. Tal posición puede expresar simbólicamente la misma oración, variando según las culturas y la sensibilidad personal. En algunos lugares, los cristianos están adquiriendo hoy una mayor conciencia de cómo puede favorecer la oración una determinada actitud del cuerpo».

«La meditación cristiana de Oriente ha valorizado el simbolismo psicofísico, que a menudo falta en la oración de Occidente. Este simbolismo puede ir desde una determinada actitud corpórea hasta las funciones vitales fundamentales, como la respiración o el latido cardíaco. El ejercicio de la «oración del Señor Jesús» por ejemplo, que se adapta al ritmo respiratorio natural, puede, al menos por un cierto tiempo, servir de ayuda real para muchos».

«Por otra parte, los mismos maestros orientales han constatado también que no todos son igualmente idóneos para hacer uso de este simbolismo, porque no todas las personas están en condiciones de pasar del signo material a la realidad espiritual que se busca. El simbolismo, comprendido en modo inadecuado e incorrecto, puede incluso convertirse en un ídolo y, como consecuencia, en un impedimento para la elevación del espíritu a Dios. Vivir en el ámbito de la oración toda la realidad del propio cuerpo como símbolo es todavía más difícil: puede degenerar en un culto al mismo y hacer que se identifiquen subrepticiamente todas sus sensaciones con experiencias espirituales».

«Algunos ejercicios físicos producen automáticamente sensaciones de quietud o de distensión, sentimientos gratificantes y, quizá, hasta fenómenos de luz y calor similares a un bienestar espiritual. Confundirlos con auténticas consolaciones del Espíritu Santo sería un modo totalmente erróneo de concebir el camino espiritual; atribuirles significados simbólicos típicos de la experiencia mística, cuando la actitud moral del interesado no se corresponde con ella, representaría una especie de esquizofrenia mental que puede conducir incluso a disturbios psíquicos y, en ocasiones, a aberraciones morales».

«Esto no impide que auténticas prácticas de meditación provenientes del Oriente cristiano y de las grandes religiones no cristianas, que ejercen un atractivo sobre el hombre de hoy, alienado y turbado, puedan constituir un medio adecuado para ayudar a la persona que hace oración a estar interiormente distendida delante de Dios, aunque le urjan las solicitaciones exteriores».