¿Qué es rezar? Sencillamente, hablar con Dios. No son necesarias oraciones complicadas ni largas. Solo una palabra, viva, llena de fe, entregada y repleta de confianza en Él, que la recibe con el corazón abierto, solo eso basta.
Hoy, dedícate unos minutos a hablar con Dios, a contarle tus proyectos, novedades, problemas, churreteos…
¡Sincérate con Él! Busca un hueco y míralo