Nuestra Señora Reina de la Paz a Pedro Regis el 21 de junio de 2022:
Queridos hijos, Yo soy vuestra Madre y os amo. Os pido que busquéis imitar a mi Hijo Jesús en todo. Él es la fuente de toda bendición y tu verdadera liberación y salvación está solo en Él. Yo soy la Madre de la Gracia y la Misericordia. Abrid vuestros corazones y aceptad la Voluntad del Señor para vuestras vidas. Sabes muy bien cuánto ama una madre a sus hijos. Sed obedientes a mi llamado. Vendrán tiempos difíciles para los justos, pero el Señor estará con los Suyos. ¡No te retires! El Señor te ha llamado y espera mucho de ti. Serás perseguido y rechazado por amar y defender la verdad, pero no te desanimes. El cielo te está vigilando. En este momento, como Madre de Gracia, los colmo con las bendiciones del Cielo. ¡Adelante sin miedo! Este es el mensaje que les doy hoy en el nombre de la Santísima Trinidad. Gracias por haberme permitido reunirlos aquí una vez más. Los bendigo en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. Estén en paz.
El 18 de junio de 2022:
Queridos hijos, sean honestos en sus acciones. No lo olvides: todo en esta vida pasará, pero la Gracia de Dios dentro de ti será Eterna. Yo soy vuestra Madre, y he venido del Cielo para llamaros a la conversión. Vuélvete a Aquel que es tu Camino, Verdad y Vida. Cuida tu vida espiritual. Buscad fuerzas en la oración y en la Eucaristía. Te diriges hacia un futuro de gran persecución. Muchos fervientes en la fe se retirarán por temor, pero aquellos que permanezcan fieles a Mi Jesús serán proclamados Beatos por el Padre. Vendrán tiempos difíciles, pero no estarás solo. Estaré con ustedes. ¡Valor! Voy a orar a Mi Jesús por ustedes. Este es el mensaje que les doy hoy en el nombre de la Santísima Trinidad. Gracias por haberme permitido reunirlos aquí una vez más. Los bendigo en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. Estén en paz.
El 16 de junio de 2022:
Queridos hijos, Mi Jesús los ama y los espera con los Brazos Abiertos. Vuélvete a Aquel que es tu Bien Absoluto y te conoce por tu nombre. No lo olvidéis: vuestra victoria está en la Eucaristía. Pase lo que pase, quédate con Jesús, porque sólo en Él está tu salvación. Te diriges hacia un futuro de gran oscuridad espiritual. El humo del Diablo causará ceguera espiritual en la Casa de Dios, y muchos dogmas serán negados. Sufro por lo que viene para ti. Doblad vuestras rodillas en oración. Confía en Jesús y serás victorioso. ¡Adelante en defensa de la verdad! Este es el mensaje que les doy hoy en el nombre de la Santísima Trinidad. Gracias por haberme permitido reunirlos aquí una vez más. Los bendigo en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. Estén en paz.
Moral y Luces 