Oración, Confesión y Eucaristía. . .

Nuestra Señora Reina de la Paz a Pedro Regis el 11 de junio de 2022:

Queridos hijos, no vivan lejos de la oración. Cuando estás lejos, te conviertes en un objetivo para el enemigo de Dios. Te diriges hacia un futuro de gran desprecio por las cosas sagradas. Las grandes verdades serán rechazadas, y la gran Babel estará presente en la Casa de Dios. No te alejes de la verdad. Arrepentíos sinceramente de vuestros pecados y buscad la Misericordia de Mi Jesús a través del Sacramento de la Confesión. Cuando te sientas débil, busca fuerza en la Eucaristía y la Victoria de Dios ocurrirá para ti. Conozco a cada uno de ustedes por su nombre y oraré a Mi Jesús por ustedes. ¡Valor! Es en esta vida y no en otra que deben testificar que pertenecen a Mi Hijo Jesús. ¡Adelante en defensa de la verdad! Este es el mensaje que les doy hoy en el nombre de la Santísima Trinidad. Gracias por haberme permitido reunirlos aquí una vez más. Los bendigo en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. Estén en paz.

El 9 de junio de 2022:

Queridos hijos, buscad a Jesús, porque sólo Él es vuestro todo. En Él está la verdadera liberación y salvación para los hombres. Abraza Su Luz y defiende Su Evangelio y las enseñanzas del verdadero Magisterio de Su Iglesia. La muerte estará presente en la Iglesia, pero los que aman y defienden la verdad permanecerán vivos. Yo soy vuestra Madre Dolorosa y sufro por lo que viene para vosotros. Oración, confesión y Eucaristía: estas son las armas para el gran combate espiritual. Este es el mensaje que les doy hoy en el nombre de la Santísima Trinidad. Gracias por haberme permitido reunirlos aquí una vez más. Los bendigo en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. Estén en paz.

El 7 de junio de 2022:

Queridos hijos, Mi Jesús necesita vuestro testimonio sincero y valiente. ¡No te desanimes! El silencio de los justos fortalece a los enemigos de Dios. La oscuridad de las falsas doctrinas contaminará a muchos de los consagrados. Muchos se retirarán, pero vosotros, que sois del Señor, lleváis la luz de la verdad a todos los que viven en la ceguera espiritual. Tu gran tesoro es la fe. Cuida tu vida espiritual. No permitáis que la llama de la fe se apague dentro de vosotros. Puedes derrotar al diablo por el poder de la oración y la Eucaristía. Abrazad el Evangelio de Mi Jesús y todo será victoria para vuestras vidas. ¡Adelante en defensa de la verdad! Este es el mensaje que les doy hoy en el nombre de la Santísima Trinidad. Gracias por haberme permitido reunirlos aquí una vez más. Los bendigo en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. Estén en paz.

El 4 de junio de 2022:

Queridos hijos, en los tiempos más difíciles vividos por la Iglesia de Mi Jesús, el Espíritu Santo actuó a través de hombres y mujeres de fe y los justos vencieron. La victoria de la Iglesia vendrá por la poderosa acción del Espíritu Santo. La cruz será pesada, pero habrá victoria para la única y verdadera Iglesia de Mi Jesús: la Iglesia Católica. Abrid vuestros corazones y dejéis guiar por el Espíritu Santo. Cuando todo parezca perdido, el Señor te dará la victoria. Buscad fuerzas en las Palabras de Mi Jesús y en la Eucaristía. Dame tus manos y Te conduciré a Aquel que es tu único Camino, Verdad y Vida. Los enemigos actuarán, pero el Señor estará con Su pueblo. ¡Valor! Este es el mensaje que les doy hoy en el nombre de la Santísima Trinidad. Gracias por haberme permitido reunirlos aquí una vez más. Los bendigo en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. Estén en paz.

El 2 de junio de 2022:

Queridos hijos, el camino hacia la santidad está lleno de obstáculos, pero como Él prometió, Mi Jesús siempre estará con ustedes. Sé fiel. Huye de los atajos que los hombres te ofrecen. Quédate con Jesús, porque sólo Él es el Camino que te llevará a la salvación eterna. Doblad vuestras rodillas en oración. Te diriges hacia un futuro de grandes pruebas. Verás horrores en la Casa de Dios por culpa de los malos pastores, pero no te retires. No hay victoria sin la cruz. Pase lo que pase, permaneced fieles a las enseñanzas del verdadero Magisterio de la Iglesia. Tu victoria está en Jesús. Estad atentos. No olvides las grandes lecciones del pasado. ¡Valor! Te amo y estaré contigo. Este es el mensaje que les doy hoy en el nombre de la Santísima Trinidad. Gracias por haberme permitido reunirlos aquí una vez más. Los bendigo en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. Estén en paz.