
Nuestra Señora a Gisella Cardia el 9 de marzo de 2022
Querida hija, gracias por acoger mi llamado en tu corazón. Hija, te ruego que les pidas a todos mis hijos que eliminen el orgullo que todavía se enfurece en sus corazones. Basta de cizaña que aleja a tus hermanos y hermanas, y basta de arrogancia; pero doblad vuestras rodillas ante el Señor. Arrepentíos, hijos míos, no es demasiado tarde; arrepiéntete completamente y no seas tentado por el Diablo, porque su astucia es aguda. Oren por el mundo, porque no habrá más paz. Hagan penitencia, queridos hijos, este ya no es el momento de vivir para las cosas del mundo, sino de levantar sus ojos al cielo y ser más espirituales: su elevación solo les traerá beneficios. La tierra ahora está formada por una humanidad que es perversa y sorda a mis llamados como Madre. Ahora los dejo con mi bendición maternal en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.