Cuando todo parezca perdido, ¡la Voz de Dios Padre vibrará en el Universo!

Revelaciones del CERRO DEL BUEN PASTOR

Carbonia enero 19, 2022

Italia está en el ojo del huracán,

Sufrirá mucho por su indiferencia a las leyes de Dios.

Amados hijos, yo soy la Virgen del Carmelo, vengo a traeros ayuda, a haceros hombres de amor y de caridad.

El tiempo de mi manifestación está cerca; Pido a todos los seguidores de mi Hijo Jesús que permanezcan firmes en la fe y en el respeto a las Leyes Divinas.

Cuando todo parezca perdido, ¡la Voz de Dios Padre vibrará en el Universo! Muchos corazones se volverán locos de miedo porque sólo entonces entenderán su pecado.

Amados hijos, se les ha dado la gracia de abrir sus corazones a su Único Dios Verdadero, su Creador. Abre de par en par la puerta de tu corazón a Cristo Jesús; sólo vivirán los que son fieles a Su Voluntad.

Como Madre y Reina vengo a rogar por vuestra conversión, oh hombres, como Madre de Dios Salvador os pido humildemente que volváis pronto a la Verdad. La sombra de la muerte se apodera de muchos corazones, pero Dios todavía quiere dar al hombre una oportunidad de salvación a través de la conversión.

Escuchad, oh hombres, y tomad nota de esta llamada divina, para que no os encontréis separados del rebaño de Dios y acabéis en el infierno.

Italia está en el ojo del huracán,

… sufrirá mucho debido a la indiferencia a las Leyes de Dios.

El hombre se ha asociado con Lucifer, se está entregando a él por una insignificante pieza de plata, … no ha puesto su fe en Aquel que es el Creador Divino, el Único Dios Verdadero. Él ha dado su parte al Mal, … se encontrará descubierto de la ayuda de Dios.

¡Pobre humanidad! … ¡Ah, qué dolor en mí! Por tus pecados todavía vivo esas terribles pestañas en mi piel y siento el dolor de las uñas en mis pies y manos.

Se han burlado de mí y me han crucificado; ¡me han atravesado el corazón con una lanza!

Pobres hombres, pobres porque esto es lo que van a sufrir hoy, ustedes que todavía me niegan en preferencia al que los va a destruir vivos.

Estás en tus últimas piernas, … el reloj ya está en su último gong. ¡Miserum est!