Santidad de la Iglesia y miembros pecadores

Desde el mismo momento de su fundación, el Señor ha tenido en su Iglesia un pueblo santo, lleno de buenas obras. Se puede afirmar que en cada época «la Iglesia de Dios, sin dejar de ofrecer a los hombres el sustento espiritual, engendra y forma nuevas generaciones de santos y santas para Cristo». Santidad en su Cabeza, Cristo, y santidad también en muchos de sus miembros. Santidad por la práctica ejemplar de las virtudes humanas y sobrenaturales. La santidad heroica es la de aquellos que «son de la carne, pero no viven según la carne. Habitan en la tierra, pero su patria es el Cielo….. Aman a los demás y los demás los persiguen. Son calumniados y bendicen. Son vilipendiados y honran a sus detractores…. Su actitud (…) es una manifestación del poder de Dios». Hay innumerables fieles que han vivido su fe de forma heroica: todos están en el Cielo, aunque la Iglesia sólo haya canonizado a unos pocos. También son innumerables, aquí en la tierra, las madres de familia que, llenas de fe, sacan adelante a sus familias, con generosidad, sin pensar en sí mismas; los trabajadores de todas las profesiones que santifican su trabajo; los estudiantes que realizan un apostolado eficaz y saben ir alegremente a contracorriente; y tantos enfermos que ofrecen su vida en casa o en un hospital por sus hermanos en la fe, con alegría y paz….

Esta santidad radiante de la Iglesia se ve a veces oscurecida por las miserias personales de los hombres y mujeres que la componen. Pero, por otra parte, esas mismas deslealtades y debilidades ayudan a manifestar, por contraste, como las sombras de un cuadro realzan la luz y los colores, la presencia santificadora del Espíritu Santo, que la mantiene limpia en medio de tantas debilidades.

Nadie echa vino nuevo en odres viejos: el licor divino de las enseñanzas del Señor, de la vida que nos ha dispensado al traernos a su Iglesia, debe estar contenido en nuestra alma, un vaso que debe ser digno, pero que es defectuoso, que puede fallar. Con fe y amor comprendemos que la Iglesia es santa y que sus miembros son defectuosos y pecadores. En ella «se reúnen lo bueno y lo malo». Está formada por una diversidad de hijos, porque a todos los engendra en la fe; pero de tal manera que no consigue conducir a todos, por su defecto, a la libertad de la gracia mediante la renovación de su vida». La propia Iglesia está formada por hombres que ya han alcanzado su destino eterno -los santos del Cielo-, por otros que se están purgando mientras esperan su recompensa definitiva, y también por los que aquí en la tierra tienen que luchar con sus defectos y malas inclinaciones para ser fieles a Cristo. No es razonable -y va contra la fe y contra la justicia- juzgar a la Iglesia por la conducta de algunos de sus miembros que no saben corresponder a la llamada de Dios; es una deformación grave e injusta, que olvida la entrega de Cristo, que amó a su Iglesia y se sacrificó por ella, para santificarla, limpiándola en el bautismo de agua, para hacerla aparecer ante Él llena de gloria, sin arrugas ni nada parecido, pero siendo santa e inmaculada. No olvidemos a Santa María, a San José, a tantos mártires y santos; tengamos siempre presente la santidad de la doctrina, del culto, de los sacramentos y de la moral de la Iglesia; consideremos con frecuencia las virtudes cristianas y las obras de misericordia que adornan y adornarán siempre la vida de tantos cristianos…. Esto nos moverá a comportarnos siempre como buenos hijos de la Iglesia, a amarla cada vez más, a rezar por aquellos hermanos nuestros que más lo necesitan.

Ser buenos hijos de la Iglesia

La Iglesia no deja de ser santa por las debilidades de sus hijos, que son siempre estrictamente personales, aunque estas faltas tengan mucha influencia en el resto de sus hermanos. Por eso, un buen hijo no tolera los insultos a su Madre, ni que le atribuyan defectos que no tiene, ni que la critiquen y maltraten.

Por otra parte, incluso en aquellos tiempos en los que el verdadero rostro ha sido velado por la infidelidad de muchos que deberían haber sido fieles y en los que sólo aparecen vidas de muy poca piedad, en esos momentos -quizá ocultos a la mirada de la gente- hay almas santas y heroicas. Incluso en tiempos oscurecidos por el materialismo, la sensualidad y el deseo de bienestar, hay hombres y mujeres fieles que, en medio de sus quehaceres, son la alegría de Dios en el mundo.

La Iglesia es Madre: su misión es «engendrar, educar y gobernar a los hijos, guiando con cuidado maternal la vida de las personas y de los pueblos». Ella -santa y madre de todos nosotros- nos proporciona todos los medios para adquirir la santidad. Nadie puede llegar a ser un buen hijo de Dios si no vive estos medios de santificación con amor y piedad, porque «no puede tener a Dios como Padre quien no tiene a la Iglesia como Madre «14. Por eso, no se concibe un gran amor a Dios sin un gran amor a la Iglesia.

Así como el amor a Dios brota del amor que nos tiene -él nos amó primero-, el amor a la Iglesia debe brotar de la gratitud por los medios que nos ofrece para alcanzar la santidad. A ella le debemos el amor por el sacerdocio, por todos los sacramentos -y de modo muy particular por la Sagrada Eucaristía-, por la liturgia, por el tesoro de la fe que ha custodiado fielmente a lo largo de los siglos…. La miramos con ojos de fe y de amor, y la vemos santa, sin mancha, sin arruga.

Si la Iglesia, por voluntad de Jesucristo, es Madre -una buena madre-, tengamos la actitud de los buenos hijos. No permitamos que se la trate como si fuera una sociedad humana, olvidando el profundo misterio que se encierra en ella; no queramos escuchar críticas contra los sacerdotes, los obispos…. Y cuando veamos errores y defectos en quienes quizá deberían haber sido más ejemplares, sepamos disculparlos, destaquemos otros aspectos positivos de esas personas, recemos por ellas… y, en su caso, ayudémoslas con la corrección fraterna, si es posible. «El amor se paga con amor», un amor con obras, que se hace notar por los que habitualmente nos conocen y tratan.

Concluyamos nuestra oración invocando a Santa María, Mater Ecclesiae, Madre de la Iglesia, para que nos enseñe a amarla cada día más.

Fátima es en su explosión de la verdad de todo lo que se ha revelado

Carbonia 2 de mayo de 2017

Vigila cada momento porque, ¡el gran desastre se acerca para esta Humanidad pecadora!

Estoy a las puertas de vuestro corazón y llamo. Yo soy el que está esperando para tomaros a todos como suyos.

Soy el que ahora descenderá del cielo para mostraros su omnipotencia en la gloria.

Con vosotros reduciré el mal y haré surgir el amor infinito.

Estad firmes en Mi Santa Voluntad y alimentaros de Mi Santo Cuerpo.

Estad atentos en todo momento porque el gran desastre se acerca para esta humanidad pecadora. Vuestra vida me pertenece, hombres, vuestra palabra está en Mí, vuestro vivir está en Mí.

Soy celoso de Mis hijos, los pondré en Mis pasos y los alimentaré con Mi Santo Amor. Disfruta ahora de estos últimos momentos antes de que veas que la situación en la Tierra se revuelve, destruiré todo lo que debe ser derribado y purificado por Mi Santo Fuego Purificador.

Mi adhesión a ustedes está en la misión que les he confiado y en la misma condición de Moisés irán; estén en la medida de Mi Amor y muéstrense en Mí sin ningún temor. He aquí que Me presento ante Mi pueblo para Mi última batalla.

La miseria del hombre en Satanás será derrotada y Satanás será encadenado a Mis Muros, para que nunca más pueda dañar a Mis hijos. Yo mantendré al diablo en mis cadenas, mis manos serán sus cadenas.

Será puesto en una condición de dolor, tanto que tendrá que clamar a Mí por misericordia.

¡Suficiente! ¡Basta! ¡Basta! Yo había predicho este tiempo, aquí está, todo se cumplirá según las Sagradas Escrituras como os anunciaron los profetas de ayer y de hoy.

Yo y María Santísima estableceremos una nueva vida en el amor y la alegría eterna, y habitaré en los corazones de mis hijos. ¡La verdad está en el mundo! … Debe ser conocida por todos los pueblos de la tierra.

Mis lirios son cándidos, aquellos lirios que Yo mismo he querido cultivar en mi Palabra. He aquí que se manifestarán al mundo en Mi Verdad y hablarán en Mi Santo Nombre y engendrarán en Mi Amor Paternal. Tendrán abundancia de todo Mi bien y las semillas estarán en Mí.

Me pertenecen, están en Mi Propia Persona, en el amor infinito, estarán en Mí como nuevos hijos en Adán, para ser regenerados en Mí como hijos de la vida eterna.

La salud de Mis hijos es preciosa para Mí, ahora pondré Mi Sello en vuestros corazones en el Amor infinito, y todo será como lo había diseñado desde el principio de la vida.

La Tierra se presentará a los ojos de Mi nuevo pueblo como una tierra de amor y de inmensa felicidad. Se abrirá a Mi nuevo pueblo con sus verdes praderas y manantiales de agua fresca. En el Jardín del Amor, sólo se cultivarán las flores del Amor.

Dios os ama y quiere que seáis todos Suyos, hijitos,

perseveren y avancen, ¡todo está logrado!

Fátima está en su explosión de la verdad de todo lo revelado.

Amad al Señor vuestro Dios y venerad a su Santísima Madre María. Poned vuestra casa en orden y cantad nuevos himnos a vuestro Dios-Amor que viene a liberar a su pueblo.

La Pascua es la resurrección de todo hombre, DIOS PADRE ha enviado a su Hijo para renovar la Tierra y toda la Humanidad. ¡Ahora serás renovado en ÉL, la PASCUA! ¡La vida eterna!

Disfrutando de la gracia de Dios, recibiréis los dones del Espíritu Santo y otorgaréis al mundo la gracia que os será dada por la gracia.

Amados hijos, moved vuestros corazones hacia el Altísimo, venid a reinar a su lado, porque ha llegado vuestra hora, la hora de daros a conocer al mundo como hijos del Altísimo.

Dios os ama, os bendice y os pide que progreséis en el amor y en la caridad.

¡Sed felices de ser Mis elegidos, los de la verdad infinita en Dios!

¡La paz sea con vosotros!

Dios Padre

«Es hora de admitir el Fracaso»

Dr. Carlos Alberto Díaz. Profesor Titular Universidad ISALUD.

Es hora de admitir, que fueron más los fracasos que los aciertos, y estos no paran de acontecer ante cada embate de la pandemia. Uso el lineamiento del artículo Ehud Quimron en sus críticas al Ministerio de Salud de Israel, y análogamente lo que hicimos nosotros en un fracaso que nos tiene que hacer reflexionar, pensar en cómo las acciones pueden mejorar.

Al final, «la verdad siempre será revelada, y la verdad sobre la política del coronavirus está comenzando a revelarse», como la económica, el gasto público, el déficit de las cuentas públicas infinanciable, el rumbo al default con el FMI, con el club de Paris, crisis de empleo e ingresos, el colapso del estado, el fracaso de control de la inflación, el presidente va a visitar a Rusia y a China, mientras peticionamos el favor de EE.UU, en una confusión pueril de política internacional, la impunidad consecuente de la argentina, hipocresía de funcionarios camporistas que viajan a destinos exclusivos con dólares ajenos, aprovecharse de la falta de memoria de la ciudadanía constantemente, que olvida para no sufrir, la anomia de esta sociedad donde los delincuentes pasan por una puerta giratoria sin quedar en celdas, gracias al zafaronismo y el negacionismo del delito penal, las justificaciones inverosímiles que nos significan como idiotas que servimos para pagar impuestos, estamos dentro del zoológico de la administración federal de ingresos públicos, tributando para seguir fomentando la falta de esfuerzo por lograr un empleo formal, o por estudiar, educación pública que supo diferenciar la república argentina del resto de Latinoamérica.

«Las políticas de confinamiento (lockdown) produjeron efectos devastadores en la salud pública a corto y largo plazo». Los efectos (para mencionar sólo algunos) incluyen tasas de vacunación más bajas contra otras patologías, empeoramiento en los resultados de enfermedades cardiovasculares, menores detecciones de cáncer y deterioro de la salud mental—lo que conducirá a un mayor exceso de mortalidad en los próximos años, siendo la clase trabajadora y los miembros más jóvenes de la sociedad aquellos sobre los que recaerá el peso más grande de estas medidas. Dejar a los niños sin escuelas es una grave injusticia.

Penamos como gestores sanitarios, hospitalarios, de sistemas de salud, Esforzándonos para atender a los pacientes, con quiebres de stock y aumentos especulativos de precios, postergando la demanda no covid por más de dos años. Y Dos años tarde de evolución de la pandemia en Argentina, «finalmente nos damos cuenta de que un virus respiratorio no puede ser derrotado«, no hay ninguna guerra que se libre contra él, con una profunda desazón, porque nos vacunamos en el valor del rebaño, pero por la mutación que tenemos nos hizo huésped sensibles, no para la infección grave, pero para seguir contagiándonos y transmitiendo, es menos grave, y contagia menos días, pero entre tanta transmisión tensionamos el sistema laboral, aunque también el sanitario, hoy estamos en casi la mitad de las camas de terapia intensiva, no solo para pacientes con covid, pero los otros necesitan otras cosas y que cualquier intento de este tipo está condenado al fracaso. Hemos maltratado a nuestro personal no mejorando sus condiciones ni mejorando salarios. No tenemos valentía para evitar dispositivos médicos, sin agregar valor.

No crecer en la cantidad de hisopados en función de su positividad, en la utilización de barbijos y la inconducta de la gente generando todos los días en las playas atlánticas con episodios hiper contagiadores, entonces la pandemia, no tendrá perfil ni sudafricano, ni del reino unido, porque la migración interna de cinco millones de argentinos, cada quince días generará un flujo de contagios que no disminuirá los casos, cómodos por encima de los cien mil.

Se ha fracasado en la campaña de vacunación, mucha gente sin la primer dosis, sin ir a buscar los que faltan. Usar vacunatorios partidarios, no los instalados.

Fracaso En conseguir vacunas de ARNm, y en la distribución justa de los elementos de diagnóstico de test rápidos. Porque se ha provocado, por compras de los Ministerios de salud, quiebres de stock. El ministerio de CABA y provincia de Bs As no lo admiten por personalismos que ambicionan otros cargos en la gestión política, por ello no han admitido casi ningún error en los últimos dos años, pero en retrospectiva está claro que ha fracasado miserablemente en casi todas sus acciones, e incluso los medios de comunicación ya están teniendo dificultades para cubrir su vergüenza, de los dichos alarmistas, de inculpar runners a decir que la pandemia terminó, para que la gente vaya a votar. A los gestores sanitarios nos volvieron locos con protocolos, que cambian cada tres días y no acordadamente, sabiendo la movilidad de las personas de la capital a su periferia sin límites, tenemos que elegir quién nos mata. El Ministerio de La nación ante la pelea de dos Ministerios tan fuertes, aunque este a favor de Caba, no puede hablar y debe tratar de consensuar. El fracaso de haber comprado una vacuna de Sputnik con dos componentes, que nos sirvió para tener anticuerpos neutralizantes, pero no podemos movernos fuera del país, y nunca llegaron las segundas dosis, porque esta no está autorizada, porque entre otras cosas Gamaleya no quiere suministrar información que le solicita OMS, por lo tanto su autorización se retrasa. La demora en la producción de la vacuna de Astra Zeneca por parte de nuestro laboratorio. Las vacunas de ARNm que no llegan y fueron compradas, y faltan quince millones. La demora en iniciar la administración de tercera dosis al resto de la población y la cuarta al personal de salud en el mes de Febrero 2022. La necesidad de vacunar actual de vacunar a los trabajadores informales en sitios públicos, estaciones de tren y de ómnibus, en los boliches bailables, y recitales: «queres entrar, entonces te tenes que vacunar», exigir pasaporte sanitario, vacunar a los jóvenes que transmiten. Se impulsò el uso de la vacuna Sinopharm en niños, con dudoso respaldo para ello. Insistiendo por el camino sinuoso de la falta de transparencia. La recuperación es más protectora que una vacuna, a pesar de los conocimientos previos y las observaciones que muestran que las personas vacunadas no recuperadas tienen más probabilidades de infectarse que las personas recuperadas. Se negó a admitir que los vacunados son contagiosos a pesar de las observaciones.

En base a esto, se esperaba lograr la inmunidad colectiva mediante la vacunación, y también se falló en eso.

«Se negó a adoptar la «Declaración de Barrington», firmada por más de 60,000 científicos y profesionales médicos, u otros programas de sentido común». . En lugar de los programas y las personas adecuadas gestoras, que trataban pacientes, han elegido profesionales que carecen de entrenamiento, de atender pacientes, que hablaban de algo que no sabían, un gobierno de científicos, teóricos.

Se generó una disputa incorrecta en cuanto a la concurrencia de los niños, en las escuelas, privando de educación a los más postergados que no tenían conectividad.

La enfermedad es docenas de veces más peligrosa para los grupos de riesgo y los adultos mayores en las cepas que hasta ahora han circulado, que para los jóvenes que no están en grupos de riesgo.

No se ha establecido un sistema eficaz para informar los efectos secundarios de las vacunas, e incluso se han eliminado los informes sobre los efectos secundarios de su página de Facebook. En su lugar, optó por publicar artículos no objetivos junto con altos ejecutivos de Pfizer sobre la efectividad y seguridad de las vacunas.

Daño irreversible a la confianza

Se dividió aún más a la sociedad y se polarizó el discurso con cada gesto. Se calificó, sin ninguna base científica, a las personas que eligieron tener actividad al aire libre como propagadores de enfermedades. Usted promueve, de una manera sin precedentes, una política draconiana de discriminación, negación de derechos y selección de personas, incluidos niños, para su elección médica. Una selección que carece de toda justificación epidemiológica.

Sin embargo, desde las alturas de la arrogancia de una buena imagen inicial para la sociedad, que parecía ideal, que por falta de ideas llevó a prolongar excesivamente la cuarentena, también han ignorado el hecho de que al final la verdad será revelada. Y comienza a revelarse. La verdad es que han llevado la confianza del público, a un mínimo sin precedentes, y han erosionado el estatus como fuente de autoridad. La verdad es que han quemado cientos de miles de millones de pesos en vano: por publicar intimidación, mensajes contradictorios, por pruebas ineficaces, por confinamientos destructivos y por interrumpir la rutina de la vida en los últimos dos años.

Ustedes han destruido la educación de nuestros hijos y su futuro. Hiciste que los niños se sintieran culpables, asustados, que las personas fumaran, bebieran, se volvieran adictos, abandonaran y pelearan, como lo atestiguan los directores de escuelas de todo el país. Ha dañado los medios de vida, la economía, los derechos humanos, la salud mental y la salud física.

Cuando comparas las políticas inútiles, los caminos insensatos, destructivos que están siguiendo con las políticas sensatas de algunos otros países, puedes ver claramente que la destrucción que han causado solo ha agregado víctimas más allá de los vulnerables al virus.

El sendero de La economía que eligieron nos terminó de arruinarnos, y ponernos al borde del abismo, definitivamente en el default, los desempleados, la pobreza, la marginación, la postergación, la falta de inversión, los niños cuya educación destruiste, son las víctimas excedentes como resultado de las propias acciones solamente.

Actualmente no hay una emergencia médica, pero usted ha estado cultivando tal condición durante dos años debido a la lujuria por el poder, la falta de programas, los presupuestos y el control.

La única emergencia ahora es que todavía se establecen políticas y se tienen enormes presupuestos para propaganda en lugar de dirigirlos para fortalecer el sistema de atención médica y a sus trabajadores, a los ciudadanos, la atención primaria y los hospitales.

Es así que le dedicamos seis veces más a subsidios de las tarifas de servicios públicos, para el consumo de energía que a la salud pública, en forma totalmente inequitativa, ahorremos energía, subsidiemos menos, inviertan más en educación y en salud pública, y en esta pandemia que ya nos costó 120.000 vidas, algo impensado cuando empezamos.

Mensaje del Prelado (18 enero 2022)

Del 18 al 25 de enero, la Iglesia entera reza por la unidad de los cristianos. En su mensaje, el prelado del Opus Dei pide oraciones por esta intención.

Queridísimos: ¡que Jesús me guarde a mis hijas y a mis hijos!

Empiezan ocho días en los que rezaremos especialmente por la unidad de los cristianos. La oración, que en este octavario eleva la Iglesia, tiene su fuente en el diálogo de Jesús con su Padre en la Última Cena, rodeado de los apóstoles: “No ruego solo por estos, sino por los que van a creer en mí por su palabra: que todos sean uno; como tú, Padre, en mí y yo en ti, que así ellos estén en nosotros, para que el mundo crea que tú me has enviado” (Jn 17,20-21). El Señor rezó también por nosotros: por quienes, con el paso del tiempo, llegaríamos a ser miembros de su Iglesia. Y añadió que la unidad será siempre necesaria “para que el mundo crea”.

Procuremos intensificar, en estos días, nuestra oración para que se llegue a cumplir el querer de Dios: “Un solo rebaño y un solo pastor” (Jn 10,16).

Este tiempo nos puede servir también para considerar el valor de la unidad en otros muchos y diversos aspectos, conscientes de que “la unidad es síntoma de vida” (san Josemaría, Camino, n. 940). ¡Qué bueno es cuidar con pequeños detalles cotidianos esta unidad! A veces tendremos que ceder en gustos o ideas propias, legítimas, pero nos servirá recordar que “el todo es más que las partes” (Francisco, Evangelii gaudium, n. 235); la unidad es un valor más importante que tantas otras cosas, precisamente porque es condición de vida.

Con mi bendición más cariñosa,

vuestro Padre

Roma, 18 de enero de 2022

EL BALANCE DE LOS CREYENTES

Los judíos guardan la ley de Dios (Toráh) pero no creen en el mesías. Los cristianos creen en el mesías, pero no guardan la ley de Dios porque están bajo el “nuevo pacto”, porque “son salvos por fe y no por obras”, porque la ley de Moisés fue abolida. 

¿Cuándo Yeshua dijo “conocerás la verdad y la verdad te hará libre” (Juan 8:31) a que verdad se refería? Si el vino a cumplir la ley (Toráh) y no ah abolirla, si estamos bajo el nuevo pacto que el padre nos prometió por medio del profeta Jeremías de poner su ley en los corazones y escribirlos en la mente de Israel y de Judá, donde también nos dijo que él será nuestro Dios y nosotros su pueblo (Jer 31:33). Profecía de la cual el apóstol pablo hizo referencia en los capítulos de Hebreos 8 al 10, dándonos una interpretación extensa de que significa esa nueva alianza, de cómo no necesitaríamos más hacer sacrificios en el templo porque ya el mesías fue nuestro cordero sacrificado para siempre, completando así esa parte de la ley. Pero luego en Hebreos 10:16 vuelve pablo a recordarnos esas palabras del profeta diciendo que a través del espíritu santo podemos confirmar este nuevo pacto. «Pondré mis leyes (Toráh) en su corazón y las escribiré en su mente». ¿Entonces cómo podemos decir que la ley es de Moisés? ¿De los judíos? Cuando claramente los profetas y toda la Biblia nos indica que la ley es de Dios dada a Moisés para el pueblo y no de Moisés para los judíos.

Es cierto, en Efesios 2: 8-9 dice que somos salvos por gracias mediante de la fe y no por obras, pero… ¿Nadie ha leído Efesios 2 completo? ¡Por qué lo primero que dice Pablo es que estábamos muertos por nuestras transgresiones y pecados! ¿Qué es pecar? ¡Bueno, eso es algo que cada persona interpreta como quiere hoy en día! Pero para los que dicen creer en la Biblia entonces deberían tener bien claro que el pecado es infringir la ley que Dios le dio a su pueblo. El versículo 10 nos dice que fuimos creados por Dios PARA LAS BUENAS OBRAS y debemos ponerlas en práctica así que, si el pecado es la infracción de la ley de Dios, eso significa que las buenas obras es el cumplimiento de la misma. Lo que Yeshua vino anular fue todas esas leyes originadas por hombres que se apartaban completamente de la Toráh dada a Moisés, escrita dela misma mano de Dios. Todo ese libro que el padre fue dándole a Moisés por tantos años y el cual dejo escrito para que tú yo pudiéramos leer y obedecer hoy y así prepáranos para la venida de nuestro rey. Por eso el versículo 15 dice que el ánulo esa ley que consiste en mandatos y reglamentos para ponerle fin a esa enemistad entre los dos pueblos (Israel y Judá). Para que los dos pudieran entrar por medio del espíritu santo y de su sangre derramada a esa renovación del pacto que hizo Dios con su pueblo cuando los libero de Egipto.

Amado de Dios, si tú crees en el mesías, no te sientas como un gentil, ¡no vuelvas a permitir que nadie te diga que eres un gentil! Si él te rescató, te limpio con su sangre y te hizo libre, es para que entiendas que el vino a darle la verdadera interpretación a la ley de Dios, que a través de Él conoces la verdad, y esa verdad te hace libre. Grábate el verso 19 de Efesios 2. Tú eres Israel, tú eres un ciudadano del pueblo de Dios, ¡eres familia! Las promesas del Padre son tuyas, pero recuerda que todo ciudadano debe cumplir la ley en donde mora, y eso mismo le pide Dios a su pueblo. Me encanta el saludo de Santiago, “saludo a las doce tribus perdidas de Israel”(Santiago 1:1), el cual entra en contexto con lo que dijo Yeshua en Mateo 15:24, “No he sido enviado sino a las ovejas perdidas de la casa de Israel”. Santiago 2 nos da unentendimiento de la manera como los que decimos creer y amar a Yeshua debemos actuar.

El balance de los creyentes no es solo ley y no mesías ni tampoco solo mesías y no ley. Apocalipsis nos advierte de todos los castigos que vienen para aquellos que desobedecen, para los que hacen la maldad y no aman al padre. Pero también nos muestra el balance del pueblo de Dios “aquí se verá la fortaleza del pueblo SANTO(Kadosh), de aquellos que cumplen los mandamientos de Dios y se mantienen fieles en Yeshua” (Apocalipsis 14:12). Cada día que Dios te permite vivir, tienes la oportunidad de empezar a vivir una vida en santidad, pero también recuerda que cada día la puerta se va cerrando más y más.

Es importante tener presente que el ataque del enemigo es contra los que obedecen los mandamientos de Dios y siguen fieles al testimonio de Yeshua(Apocalipsis 12:17). Aquellos que buscan la obediencia y creen en el mesías, van a ser atacados por sistemas religiosos, por amigos, por familiares y por todo aquel que quiere acomodar la palabra de Dios a su manera por no querer obedecer lo que está escrito en ella.

Yeshua como descendiente de David, conocedor de la Torah, los escritos de los profetas, salmos y proverbios sabía perfectamente a lo que se refería al decir “La verdad te hará libre”, “Si me amas obedece mis mandamientos”. Concia el corazón de David, y ese mismo corazón es el que el busca en aquellos que dicen amarle.

Padre,
Te doy gracias por la persona que tomo el tiempo de leer este mensaje. Llena su mente de sabiduría atreves de tu espíritu santo, ayúdale a entrar en ese pacto tan hermoso y lleno de misericordia que le has ofrecido por medio de Yeshua, dale un corazón de carne lleno de amor a tu palabra y protege todo su ser de los ataques del enemigo para que cada día pueda aprender un poco más de tu voluntad la cual solo se encuentra en tu palabra. Llévale al camino de la santidad. En el nombre de Yeshua.

¡Amén!