Padre Pío y la triste historia del Papa que fue abortado

Cuántas vidas cobardemente arrancadas habrían podido cambiar el curso de la humanidad y de la Iglesia…

Circula en las redes sociales y blogs católicos un texto que narra la historia del día en que el Padre Pío le mostró a una mujer al hijo que ella abortó. Lo más curioso es que, por voluntad de Dios, el niño habría sido Papa.

La historia

«A una mujer que fue a su confesionario, el Padre Pío le dijo:

– Cierre los ojos y dígame qué ve.

La señora obedeció, cerró los ojos y dijo:

– Veo una plaza enorme con mucha gente. Entre las personas, veo una procesión que se mueve solemnemente. Veo en la audiencia a muchos sacerdotes, obispos y cardenales: todos preceden a un Papa que está asumiendo el trono. Sí, veo precisamente a un Papa en un trono grande y una gran multitud que aclama a ese Papa, muy bonito… Pero ¿qué significa todo eso?

El Padre Pío respondió:

– El niño que usted mató en su vientre con el aborto, en la voluntad de Dios, debía ser ese Papa.

La pobre mujer gritó y se desmayó junto al confesionario».

Aunque no haya sido posible comprobar la autoría del texto, la historia es de fundamental importancia, pues nos lleva a reflexionar sobre una situación común y cruel: el arrepentimiento de muchas mujeres que han abortado.

Otro punto que saca a la luz el texto: ¿cuántas personas han sido cruelmente asesinadas aún en el vientre materno y podrían haber cambiado la historia de la humanidad y de la Iglesia?

Además, este hecho sirve para recordarnos la posición del Padre Pío, quien siempre estuvo vehementemente en contra del aborto.

Padre Pío y el aborto

El Padre Pío llegó, incluso, a negar la absolución a una mujer que había abortado. El caso está en el libro Padre Pio’s Jack of All Trades, del fraile franciscano Pellegrino Funicelli. Al ser cuestionado sobre su dureza frente al aborto, Padre Pío respondió:

“El día en que las personas pierdan el sentido del horror por el aborto será el día más terrible para la humanidad. El aborto no es solo un homicidio, es también un suicidio. ¿No deberíamos tener el valor de manifestar nuestra fe frente a aquellos que cometen dos crímenes en un solo acto?».

¿Suicidio?

Sí, el Padre Pío consideraba el aborto un suicidio. Y explicó:

“Entenderías este suicidio del género humano si, con el ojo de la razón, vieras la tierra poblada de ancianos y despoblada de niños, quemada como un desierto. Si reflexionaras así, entenderías la doble gravedad del aborto: la mutilación también de la vida de los padres.

A estos padres, esparciré la ceniza de sus fetos destruidos, para mostrarles sus responsabilidades y para negarles la posibilidad de apelar a su ignorancia.

Un aborto provocado no puede ser tomado con falsas consideraciones y falsa piedad. Sería una abominable hipocresía.

Hay que arrojar esas cenizas a la cara de sus padres asesinos. Si no los dejo sintiéndose culpables, me sentiré involucrado en sus propios delitos”.

Para finalizar, el propio Padre Pío reconocía su rigor en relación al aborto:

“Cuando digo palabras, quizás un poco fuertes, pero justas y necesarias para quienes cometen este crimen, estoy seguro de que he obtenido la aprobación de Dios por mi rigor”.

Cuando Carrie Fisher fue monja

La actriz que interpretó a la princesa Leia Organa en «La guerra de las galaxias» defendía la libertad religiosa

Aún el mundo llora la pérdida de la actriz que creó uno de los personajes más icónicos de su generación, y mientras, algunos de nosotros recordamos aquel momento de su carrera en el que la joven Carrie Fisher interpretó el papel de una monja en Broadway.

La obra, de John Pielmeier, era Agnes of God, sobre el misterio de la trinidad, y Fisher asumió el papel de una joven monja de clausura que había dado a luz inexplicablemente, un papel creado originalmente para Amanda Plummer (interesante coincidencia, Fisher y Plummer fueron ambas hijas de Hollywood).

No obstante, cabe destacar que también hizo de monja en un par de películas, en particular en Jay y Bob el Silencioso contraatacan y en Los Ángeles de Charlie: Al Límite.

Y para rizar el rizo, su propia madre, Debbie Reynolds, también desempeñó su famoso papel de la monja cantora en The Singing Nun, a mediados de los años 60.

Raíces judías

Aunque las inclinaciones religiosas de Fisher no eran de dominio público, el periódico Religion News Service señala: Recordemos que Fisher estuvo brevemente casada con el cantante y compositor Paul Simon. Simon canta sobre su relación en el tema Hearts and Bones : “Un judío y una medio judía errantes, libres para vagar por donde quieran…”.

Fisher era esa «medio judía errante».

El padre de Fisher era judío; su madre no. En teoría, Fisher podría haber sido considerada judía según las corrientes judías reconstruccionista y reformista en los Estados Unidos… de haber sido criada y educada en el judaísmo.

De hecho, Fisher fue criada a la luz del protestantismo por su madre, pero después se identificó como judía. Ella y su hija habían asistido a cenas de sabbat en hogares de amigos judíos ortodoxos, y a veces asistían a los servicios de la sinagoga.

Sin embargo, hace unos años, sí hablo sobre religión, a su manera:

La actriz de Star Wars Carrie Fisher se enfadó con los cines de Reino Unido por negarse a mostrar un anuncio de la Iglesia de Inglaterra que incluía el Padrenuestro, aludiendo a temores de que pudiera ofender a los espectadores.

La oración no ofende

Estaba previsto que el anuncio de 60 segundos apareciera antes del nuevo episodio de la saga Star Wars: El despertar de la fuerza. No obstante, fue rechazado por [la agencia de publicidad] Digital Cinema Media (DCM), que representa a las cadenas principales Odeon, Cineworld y Vue, a pesar de haber sido aprobado por la Cinema Advertising Authority (CAA) y el Consejo Británico de Clasificación de Películas (BBFC).

Fisher, que repetía en su papel de la princesa Leia Organa (ahora conocida como General Organa) en el nuevo episodio El despertar de la fuerza, declaró para The Mail on Sunday que no podía concebir de qué manera esa corta emisión podría ser ofensiva para los espectadores.

«No tengo la menor idea de por qué harían algo así», decía. «¿Ofendidos? No. La gente debería buscarse una vida. No creo que sea ofensivo ver un anuncio sobre el ‘poder de la oración’ antes de Star Wars«.

Fisher, de 59 años, comparó el anuncio a la presencia de un ejemplar de la Biblia en una habitación de hotel.

«Nunca he visto un anuncio como este, pero si consideramos el cine como una habitación de hotel, entonces tienen todo el derecho a poner un anuncio sobre el poder de la oración», explicaba. «Es publicidad, así que han de ser los publicistas los que se opongan».

Descanse en paz, hermana.