«un acto objetivamente eutanásico»

Expertos en Bioética califican la muerte de Vincent Lambert

Vicente Lambert con su hermana Anne

El Observatorio de Bioética de la Universidad Católica de Valencia considera que “la muerte de Vincent Lambert tras retirarle la hidratación y la alimentación es un acto objetivamente eutanásico, ya que, aunque padecía graves lesiones cerebrales, no estaba en coma ni en fase terminal”, informa la agencia de noticias Zenit.

El enfermero francés, en estado vegetativo desde 2008, falleció tras permanecer nueve días sin hidratación y nutricióncomo consecuencia de la decisión que tomó la justicia francesa tras considerar que mantenerle con vida podría considerarse obstinación terapéutica.

Lambert sufrió un accidente de tráfico y desde entonces se encontraba en estado vegetativo. Tras una dura batalla legal con sus padres, que deseaban seguir apostando por su vida, el hospital de Reims le retiró la alimentación e hidratación y lo sedaron.

Se hizo en contra de la voluntad de sus padres y de dos hermanos, que habían agotado las vías judiciales para impedir que se retiraran los cuidados que lo mantenían con vida. Sin embargo, su mujer llevaba seis años pidiendo la muerte de su marido, ya que aseguraba que ese hubiera sido su deseo, aunque no lo dejó expresado en un testamento vital.

Retirar el soporte vital, como pueden ser la hidratación o la alimentación, solo sería éticamente válido, en caso de riesgo inminente de muerte y existencia de sufrimientos intensos bien contrastados. Sin embargo, en este caso concreto no nos parece que existiera ese riesgo, dado que Lambert llevaba en el mismo estado desde 2008 y no parecía que su salud hubiera empeorado significativamente en las últimas semanas”, apuntan desde el Observatorio de la UCV.

“La mejor solución ética a los problemas de salud graves del final de la vida “son los cuidados paliativos y no la eutanasia”, añade el Observatorio: “Las soluciones ante el final de la vida pasan por tratar la muerte como una etapa natural en la que se ayude a los enfermos, respetando su dignidad como persona, de forma que ante situaciones dramáticas y terminales se reduzca el dolor del paciente y no al paciente. En este sentido, la única respuesta ética posible son los cuidados paliativos”.

“Queremos destacar también que la muerte de cualquier ser humano siempre es digna, pues la dignidad es intrínseca a la naturaleza humana. El objetivo no es conseguir una muerte digna sino una muerte sin dolor”, aducen.

La necesidad de una inversión pública en cuidados paliativos

Por el contrario, según el Observatorio de la UCV, “lo que el Estado sí debería atender y legislar es para una mayoría de ciudadanos enfermos y sus familiares que están reclamando a voces unos cuidados paliativos de calidad. Aquí sí que existe un deber del Estado de universalizar el derecho y el acceso a estos cuidados, invirtiendo económicamente tanto como sea necesario para hacerlos realidad”.

Estos esfuerzos solo se pueden alcanzar “a través del compromiso de los gobernantes y la colaboración de sociedades compasivas y solidarias con los más vulnerables, que pongan en marcha equipos multidisciplinares de profesionales médicos, enfermeros, psicólogos, trabajadores sociales, asistentes espirituales”.

“Actualmente, en todos los casos de sufrimiento causado por dolores físicos y/o mentales, la medicina paliativa ya ha demostrado su eficacia para neutralizarlos o al menos disminuirlos. Y la sedación paliativa, cuando está indicada medicamente, puede controlar los síntomas refractarios intratables que mucha vez constituyen la causa de sufrimientos intensos”.

Existen otras respuestas “a la fragilidad y al sufrimiento humano al final de la vida o ante una enfermedad incurable”, según el Observatorio de la UCV, que son “más acordes con lo que la dignidad de los enfermos y sus familias merecen, con nuestra propia auto-representación como sociedad progresista y comprometida con sus miembros más débiles. Todas ellas empiezan por una necesaria inversión pública en cuidados paliativos”.

Confusión generada

Bruno Cazin, sacerdote y médico, vicario general de la diócesis de Lille, considera que se ha generado mucha confusión en torno a Vincent Lambert. “Se ha dicho que estaba al final de su vida, algo que es falso. Estaba en una situación de desventaja extrema: su conciencia era mínima pero no para interrumpir sus tratamientos, solo justificables como parte de un final de la vida o en una situación de obstinación irrazonable, debido a un sufrimiento insoportable. Ninguna de estas condiciones se cumplió para Lambert”.

Bruno Cazin, sacerdote y médico, vicario general de la diócesis de Lille

Declaraciones del Dicasterio para laicos, familia y vida

El cardenal Kevin Farrell en representación del Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida y la Pontificia Academia para la Vida, firmó y emitió un comunicado sobre el caso.

En él, ambas instituciones declararon compartir plenamente las manifestaciones realizadas del arzobispo de Reims, Monseñor Éric de Moulins-Beaufort y de su obispo auxiliar Monseñor Bruno Feillet ante el caso de Vincent Lambert.

Igualmente, reiteraron que la interrupción de la alimentación y de la hidratación supone una “gran violación de la dignidad de la persona” y subrayaron que el estado vegetativo, aunque grave, “no compromete de ninguna forma la dignidad de las personas que se encuentran en esta condición, ni sus derechos fundamentales a la vida y a los cuidados, entendidos como una continuidad de la asistencia humana básica”.

Además, destacaron que la interrupción de los consabidos cuidados básicos constituye “una forma de abandono del enfermo fundada en un juicio despiadado sobre su calidad de vida, expresión de una cultura del descarte que selecciona las personas más frágiles e indefensas sin reconocer su unicidad y su inmenso valor” y añaden que “la continuidad de la asistencia es un deber ineludible”.

Por último, manifestaron su deseo de que se encontraran “soluciones eficaces” que salvaguardaran la vida de Vincent Lambert y aseguraron la oración del Santo Padre y de toda la Iglesia para que así ocurriera.

El Papa Francisco se pronuncia

Por su parte, el Papa Francisco ha lamentado la muerte del enfermero francés, afirmando en su cuenta de Twitter: “Que Dios Padre acoja en sus brazos a Vincent Lambert”. “No construyamos una civilización que elimina a las personas cuya vida consideramos que ya no es digna de ser vivida: toda vida humana tiene valor, siempre”, ha exhortado el Pontífice.

Rezar por el no nacido y por su madre

La oración que Dios ama por encima de todas es la Santa Misa, y en segundo lugar, el Santo Rosario. Una sola Avemaría rezada de corazón tiene el poder de parar una guerra, traer a la naturaleza a la armonía con Dios, convertir a un no creyente, salvar una vocación, liberar a un alma del purgatorio y cambiar el futuro de modo definitivo. Satanás sabe que el Rosario es el arma que traerá su derrota, por eso trata de distraernos para que no lo recemos. Cada vez que recitas una Avemaría con devoción y atentamente, el poder del demonio es debilitado en alguna zona, en algún alma.

¿Seremos una generación pervertida? Pasaremos a la historia como una generación especial en que los papás son capaces de matar a sus hijos (aborto), y daremos paso a una generación en la que los hijos serán capaces de matar a sus papás (eutanasia). ¿Quién lo sabe?

La historia y el futuro de todas las naciones ha cambiado por la atrocidad del aborto. El aborto supone el rechazo de un don de Dios. Si rezamos el Rosario para que el aborto se detenga en el mundo, se mitiga el castigo que vendrá por estos crímenes y, además, da alivio al Corazón de Jesús.

Con su divina providencia Dios nos protege como con una gran sombrilla, sin embargo, Dios no interviene en la libre decisión de los hombres. Ahora muchos eligen oponerse a la voluntad de Dios y pecan, y es como si hicieran un hoyo en la sombrilla, entonces esa protección no es completa como Él lo tenía planeado. Ello permite a satanás entrar y ejecutara sus planes. El hombre elige y Dios permite que se haga según su elección.

El pecado trae destrucción. La estabilidad de una nación está determinada por el respeto a la vida del no nacido, la no legalización del aborto, es el factor determinante de la seguridad nacional. Esto no es una amenaza es un conocimiento verdadero, un don.

La seguridad del bebé en el útero materno es violada cuando se le saca y no se le deja desarrollarse. Nunca antes en la historia la maternidad había sido tan maltratada y tergiversada. Nunca antes la vida del no nacido había estado en tan grave peligro, pero si rezamos el Santo Rosario, los planes de satanás se pueden ver frustrados. No hay bien que nos venga de ninguna parte excepto de Dios. Cuando nos rendimos a Él, podemos crecer en fe, esperanza, caridad, humildad, simplicidad, confianza, mansedumbre. Al rezar con el corazón, con los labios o con alguna pequeña acción, nos estamos sometiendo a la Divina Voluntad.

La Virgen María reza con nosotros cuando rezamos el Rosario, nos acompaña cuando se lo pedimos, y lo hace sin tardanza. Su Corazón es un canal a través del cual nuestras oraciones suben al Cielo y recibimos la gracia de lo alto. Son oraciones de ida y vuelta. Dios recibe el sacrificio de la oración y lo usa como arma contra el mal. Cambia la oración en gracia que supera el mal en los corazones.

No importa el curso de cada acción, todo depende de Dios. Cree en esto. El alma que confía sólo en ella misma, está perdida.

La oración es como un rayo de sol. Los rayos caen del cielo y nutren las flores y la yerba, florecen y su belleza da gloria a Dios. El alma que se sumerge en la oración, se vuelve hermosa a los ojos de Dios y le da gloria. La oración es sometimiento y sacrificio. Pero el alma también debe aceptar el modo en que sus oraciones son aceptadas y respondidas. A través de la oración el alma recibe lo que necesita para su salvación; debe aceptar la Voluntad de Dios con humildad y agradecimiento, como la flor acepta lo que necesita. Dios se complace con la oración que es hecha de corazón y con sinceridad. Este tipo de oración cambia a las personas y los acontecimientos.

En el rezo de una decena del Rosario podemos añadir esta jaculatoria: “Jesús, protege y salva a los no nacidos”. Cada vez que el hombre asume ser dueño de vidas y muertes, toma el rol de Dios y el mundo cambia de algún modo.

Lo último de lo último que se ha descubierto es la importancia de las heridas de la infancia. Esas heridas están en el inconsciente o en el subconsciente. Hay heridas que el bebé ha sufrido por faltas de amor durante el tiempo de gestación, han sido rechazados y lo captan neuro-hormonalmente, esa gente requiere de oraciones de sanación interior desde el seno materno; y requieren perdonar (cfr. P. Javier Luzón, http://oraetlabora-ahora.blogspot.com/2018/02/oracion-de-sanacioninterior-desde-el.html).

NOVIAZGO CRISTIANO: 5 CONSEJOS

Tras recuperar la palabra y el concepto de noviazgo como periodo de preparación para un amor auténtico y un compromiso de por vida, Marta Espíldora, de 21 años, explica en una de las Charlas GEN que organiza la Delegación de Pastoral Juvenil de la Archidiócesis de Toledo cómo vivir cristianamente esa relación para que sea realmente un buen fundamento del matrimonio.