La canonización de Juan Pablo II cada vez más cerca

Santo Súbito

La canonización de Juan Pablo II está cada vez más cerca… ya se estudia el segundo milagro

Entre miles de posibles milagros, la Santa Sede estudia uno en particular de una curación de un sacerdote, científicamente inexplicable.

Actualizado 15 octubre 2011

Giacomo Galeazzi/Vatican Insider

Juan Pablo II será santo dentro de poco. El cardenal salesiano Angelo Amato está trabajando en la evaluación de un segundo milagro atribuíble a la intervención de Juan Pablo II. En contra de los escépticos que dentro y fuera de la Curia Romana presionan para que se frene el proceso que invocó el pueblo con furor, el “ministro” de Benedicto XVI, encargado de seguir los procesos de canonización y beatificación de toda la iglesia católica, en cambio, pretende acelerar el proceso. 

Segundo milagro del Papa polaco

Y declara que está muy cerca el reconocimiento del segundo milagro de Juan Pablo II, el Papa polaco tan amado en todo el orbe católico. El caso de cura científicamente inexplicable fue puesto «bajo investigación» del ministerio vaticano de las Causas de los Santos. Después de la beatificación del primero de mayo de 2011, para ser canonizado Juan Pablo II tendría que lograr que la Santa Sede reconociera un segundo milagro. 

Una lista de curaciones muy amplia

Una lista muy numerosa de curaciones milagrosas atribuidas a su intervención han pasado bajo la atenta mirada de la Postulación de la causa de canonización de Juan Pablo II. 

Una de ellas se considera particularmente relevante e idónea para acercar a Karol Wojtyla a la santidad, después de aquella que permitió que Benedicto XVI lo proclamara beato, es decir la curación de la monja francesa sor Marie Simon-Pierre, que sufría de la misma enfermedad que transformó los últimos años del Pontificado de JUan Pablo II en un calvario: el parkinson. 

El otro milagro, que sucedió después de la beatificación, será analizado sin prisas y con escrúpuloaseguran en el Vaticano, en donde se pone en evidencia que todavía sigue siendo motivo de alegría en todos el mundo la decisión de Benedicto XVI de llevar a los altares a Juan Pablo II hace 5 meses. El segundo milagro atribuido a la intervención del Beato Juan Pablo II debe ser reconocido, por parte del Pontífice, la Congregación para las Causas de los Santos. El dossier de los milagros atribuidos a Karol Wojtyla sigue nutriéndose con nuevas indicaciones.

Muchos milagros a la espera de ser considerados

Desde antes de la beatificación, muchos otros milagros han sido considerados en la Santa Sede, como los que tienen que ver con un hombre que se salvó en Cleeveland, Estados Unidos, de una herida muy grave en la cabeza provocada por un arma de fuego; otro caso es el de un niño polaco que tenía paralizadas las piernas y que inexplicablemente volvió a caminar tras haber rezado en la tumba de Juan Pablo II. 

El caso del niño había recibido incluso la aprobación del arzobispo de Cracovia, Stanislao Dzwisz, brazo derecho de Karol Wojtyla en Polonia y en el Vaticano durante cuatro décadas.El cardenal Dziwisz atestiguó que el pequeño, inmovilizado en una silla de ruedas por un tumor en los riñones, volvió «a caminar después de haber visitado la tumba de Juan Pablo II en las Grutas vaticanas». 

Testigo de un milagro

Y el purpurado confirmó: «fui testigo de muchas gracias que hizo Juan Pablo II. Sobre todo con enfermos de tumores. El chico polaco tiene 9 años, es de Danzica, no podía caminar porque un cáncer lo atacó a los riñones. Lo llevaron en una silla de ruedas a la tumba de Juan Pablo II. Allí rezó y, cuando salió de la Basílica de San Pedro, dijo a sus padres, sorprendidos: “Yo quiero caminar”. Se levantó y empezó a caminar». Por lo demás, el día de los funerales, miles de personas lo invocaron espontáneamente en italiano «Santo subito» (“Santo inmediatamente”). 

Herido en la cabeza

Además, en Cleveland, en el estado de Ohio, un chico de 16 años, herido gravemente en la cabeza durante un robo, se salvó y recuperó la salud cuando todos lo consideraban sin esperanzas. El capellán del hospital certificó que la prodigiosa recuperación se debió a un rosario bendito por Juan Pablo II. En enero de 2006 se abrió un sitio para recibir los testimonios de fieles sobre gracias o milagros después de la muerte de Juan Pablo II en el ámbito del proceso de beatificación del Papa. 

Han llegado miles de mensajes

Al Vaticano han llegado miles y miles de mensajes. Para tomar en consideración la candidatura, la Iglesia exige “señales” póstumos a la muerte de una figura en olor de santidad. Así, desde el 13 de mayo, cuando el Papa Benedicto XVI concedió una prórroga a los 5 años después de la muerte de una persona para comenzar el proceso de beatificación,decidieron recoger los testimonios por internet de todas partes del mundo en italiano, polaco, inglés, francés y español.

Conmovedora historia…

La canadiense Dawn Stefanowicz

Pasó su niñez envuelta en un ambiente totalmente gay. Hoy cuenta su conmovedora historia…

Vivió el sexo en casas de baño, travestimos, sodomía, pornografía, nudismo gay, lesbianismo, bisexualidad, voyeurismo y exhibicionismo.

Actualizado 15 octubre 2011

ReL

Dawn Stefanowicz tiene una de esas historias que no le dejan indiferente a nadie. Vivió una infancia de estilo gay por un padre homosexual que la implicó en su vida desordenada y hedonista.

Hoy Dawn, que ya ha sobrepasado la cuarentena, vive en Ontario (Canadá) con su marido  y sus dos hijos. 

Ha continuación ReL reproduce su conmovedor testimonio. 

Crecer en un hogar homosexual

«Me llamo Dawn Stefanowicz. Crecí en un hogar homosexual en los años 60 y 70 en Toronto, expuesta a muchas personas distintas de la subcultura GLBT (gay, lesbiana, bisexual, transexual) y a prácticas sexuales explícitas. 

Expuesta a la vida gay

»Estuve expuesta a un alto riesgo de enfermedades de transmisión sexual debido al abuso sexual, a loscomportamientos de alto riesgo de mi padre y a numerosas parejas. Incluso cuando mi padre estaba en lo que parecían relaciones monógamas, continuaba haciendo «cruising» buscando sexo anónimo. 

Sida y suicidio

»Llegué a preocuparme profundamente, a amar y entender con compasión a mi padre. Compartía conmigo lo que lamentaba de la vida. Desgraciadamente, siendo niño unos adultos abusaron sexual y físicamente de él. Debido a esto, vivió con depresión, problemas de control, estallidos de rabia, tendencias suicidas y compulsión sexual. Intentaba satisfacer sunecesidad por el afecto de su padre, por su afirmación y atención, con relaciones promiscuas y transitorias. Las (ex) parejas de mi padre, con los que me traté y llegué a apreciar con sentimientos profundos, vieron sus vidas drásticamente acortadas por el Sida y el suicidio. Tristemente, mi padre murió de Sida en 1991. 

Seguir las reglas de la vida gay

»Las muchas experiencias personales, profesionales y sociales con mi padre no me enseñaron el respeto por la moralidad, la autoridad, el matrimonio o el amor paterno. Me sentía temerosamente acallada porque mi padre no me permitía hablar de él, sus compañeros de casa, su estilo de vida y sus encuentros en esa subcultura. Mientras viví en casa, tuve que vivir según sus reglas. 

Maltrato doméstico homosexual

»Sí, amaba a mi padre. Pero me sentía abandonada y despreciada porque mi padre me dejaba a menudo para estar varios días con sus compañeros. Sus parejas realmente no se interesaban por mí. Fui dañada por el maltrato doméstico homosexual, las tentativas sexuales con menores y la pérdida de parejas sexuales como si las personas fueran sólo cosas para usar. Busqué consuelo, busqué el amor de mi padre en diversos novios a partir de los 12 años.

Estilo de vida hedonista

»Desde corta edad, se me expuso a charlas sexualmente explícitas, estilos de vida hedonistas, subculturas GLBT y lugares de vacaciones gay. El sexo me parecía gratuito cuando era niña. Se me expuso a manifestaciones de sexualidad de todo tipo incluyendo sexo en casas de baño, travestismo, sodomía, pornografía, nudismo gay, lesbianismo, bisexualidad, voyeurismo y exhibicionismo. Se aludía al sadomasoquismo y se mostraban algunos aspectos. Las drogas y el alcohol a menudo contribuían a bajar las inhibiciones en las relaciones de mi padre.

Crecer en un hogar no seguro

»Mi padre apreciaba el vestir unisex, los aspectos de género-neutro, y el intercambio de ropas cuando yo tenía 8 años. Yo no veía el valor de las diferencias biológicamente complementarias entre hombre y mujer. Ni pensaba acerca del matrimonio. Hice votos de no tener nunca hijos, porque no crecí en un ambiente de hogar seguro, sacrificial, centrado en los niños.

20 años de experiencias estresantes

»Más de dos décadas de exposición directa a estas experiencias estresantes me causaron inseguridad, de
presión, pensamientos suicidas, miedo, ansiedad, baja autoestima, insomnio y confusión sexual. Mi conciencia y mi inocencia fueron seriamente dañados. Fui testigo de que todos los otros miembros de la familia también sufrían.

Comienza la sanación

»Hasta que no llegué a los 20 y 30 años, hasta después de hacer las elecciones importantes de vida, no empecé a darme cuenta de cómo me había afectado crecer en este ambiente. Mi sanación implicó mirar de frente la realidad, aceptar las consecuencias a largo plazo y ofrecer perdón. ¿Podéis imaginar ser forzados a aceptar relaciones inestables y prácticas sexuales diversas desde corta edad y cómo afectó a mi desarrollo? Mi identidad de género, bienestar psicológico, relaciones con iguales quedaron afectadas. Desgraciadamente, hasta que mi padre, sus parejas sexuales y mi madre murieron, no pude hablar públicamente de mis experiencias.

Niños inocentes sin voz

»Al final, los niños serán las víctimas reales y los perdedores del matrimonio legal del mismo sexo. ¿Qué esperanza puedo ofrecer a niños inocentes sin voz? Gobiernos y jueces deben defender el matrimonio entre hombre y mujer y excluir todos los otros, por el bien de nuestros niños».

Más información: http://www.dawnstefanowicz.org

Sale del infierno tras encontrar a Dios

En la Comunidad del Cenáculo

Sus padres se separan, cae en la droga y el alcohol, y sale del infierno tras encontrar a Dios

Se puede salir de las drogas y el alcohol. Aquí hay un testimonio reciente de un joven austriaco que lo logró tras conocer a Jesús.

Actualizado 15 octubre 2011

ReL

La Comunidad del Cenáculo, fundada por la religiosa italiana Madre Elvira, se ha convertido en pocos años en la realidad con mayor eficacia del mundo para salir de las adicciones como la droga o el alcohol. Sus armas para luchar contra esas esclavitudes se basan en la oración y el trabajo. 

ReL reproduce el testimonio de un joven austriaco que logró salir de la droga y al alcohol, y recuperar la alegría de vivir, gracias a la Comunidad del Cenáculo que le enseñó el camino para encontrar a Dios.

Todo comienza con la separación de los padres

«Me llamo Rainer, tengo veintiséis años y soy de Viena  (Austria). Entré en la Comunidad por las heridas de la droga. Vengo de una familia que no era cristiana y mis padres se separaron cuando yo era muy chico. Todavía recuerdo que de niño muchas veces soñaba que mis padres se peleaban, así nacieron mis miedos e inseguridades. Crecí junto a mi madre y mi hermana; a mi padre lo veía cada dos semanas. Sufrí mucho por la división en mi familia, siempre mantenía la ilusión de que algún día se volverían a unir. 

Celoso por no tener una familia unida

»En la escuela comenzaron los primeros problemas: me portaba mal con los maestros y los compañeros,estaba muy celoso de los niños que tenían una familia unida. A los ocho años me tuvieron que cambiar de escuela por mi comportamiento, lo que me hizo sentir aún más distinto de los demás. 

Sin una convivencia estable

»En casa ya empezaba a perder el respeto hacia mi madre y contestarle mal. Con mi padre, en cambio, siempre era ordenado y obediente, por temor a su dureza. Desde pequeño comencé a tener una doble personalidad. No lograba mantener una relación estable, ni siquiera con mi hermana y a menudo nos peleábamos.

Alcohol y drogas a los doce años

»A los doce años probé el alcohol y las drogas livianas. Creía que había encontrado la solución a mis problemas, olvidando las horribles situaciones que vivía en casa y en la escuela.

»Comencé una vida falsa, un descenso que pronto me hizo caer en lo peor. Dejé la escuela y empecé a trabajar, mis primeros sueldos los gasté en la droga, cada vez más pesada, pero yo creía que era independiente y libre. 

El primer momento para cambiar de vida

»No me daba cuenta de cómo hacía sufrir a mi familia y tenía la fantasía de que nadie se daba cuenta de mi problema. Iba a casa sólo para bañarme y dormir; cortaba de raíz cualquier relación con mi familia. A los diecisiete años tuve una experiencia muy fea con la droga y un amigo terminó en el hospital. Cuando llegué a casa, me miré en el espejo y encontré un muerto, una persona incapaz de hacer algo bueno. Ese fue el momento en que decidí por primera vez cambiar de vida.

Dejar la droga pero no el alcohol

»Dejé la droga inmediatamente, así como a los amigos malos. Todo parecía que estaba bien, conocí una chica que fue mi primera novia y me parecía imposible ser tan afortunado. Lo único que no podía dejar del todo era el alcohol. Cada fin de semana, cuando salía con mi novia , bebía en exceso, un día, un amigo me ofreció de nuevo la droga. Acepté porque pensaba que esta vez lo podría controlar pero fue el comienzo de una nueva caída:perdí a mi novia, y en esa época se suicidó un gran amigo mío. Fue uno de los momentos más dolorosos de mi vida. 

En el precipicio

»Para disimular mi estado de ánimo, me arrojé en el mal, perdí el trabajo y todo lo que más quería. Mi familia trataba de estar cerca de mí, pero yo rechazaba su ayuda. En ese momento conocí otra chica, que aceptaba mi dependencia, la usé como “espalda” en los momentos difíciles. 

La posibilidad de cambiar

»Cambié muchos trabajos hasta que terminé de mozo en una cervecería. Allí conocí un chico que había estado seis años en la Comunidad. Al ver mi tristeza, me contó su experiencia de vida y la posibilidad de cambiar. Me parecía que no podía ser cierto lo que me contaba, porque yo sólo veía la droga, pero mis problemas aumentaban y ahora mi novia también me empujaba a cambiar. Con la ayuda de ella y de mi padre fui a los coloquios y me encontré por primera vez con los chicos del Cenacolo

No me creía lo que me decían

»Al principio me costaba creer lo que me decían, me costaba aceptar la propuesta de la oración. Cuando entré vi jóvenes sonrientes y felices con lo que hacían. Me impresionó mucho que por primera vez me ofrecieran una mano personas que yo no conocía y que no pedían nada a cambio. Las primeras semanas no quería ni escuchar hablar de oración y de fe. Repensando mi pasado me decía que Dios no podía existir: ¿cómo podría haber permitido que yo sufriera tanto? 

Esperanza en el cambio de vida

»Como veía que todos iban a la capilla a rezar, le hacía muchas preguntas sobre la fe a mi “ángel custodio”, el joven a quien me habían encomendado. Él me decía que fuera a la capilla y le confiara a Dios las cosas que me preocupaban. Así comencé mi “relación” con Dios. Me costaba mucho porque frente a la Eucaristía veía todo lo que había hecho y me veía a mí mismo. Estaba muy triste, pero al mismo tiempo la esperanza de cambiar mi vida me hacía aceptar las “ayudas” y los consejos de los que me rodeaban. Cosa que nunca había hecho.

Conocer a la Madre Elvira

»Luego de un mes tuve el gran regalo de venir a Italia y de encontrar por primera vez a Madre Elvira. Mirándola a los ojos vi mucha esperanza, y aunque no entendía lo que me decía, me tocaron su libertad y sus ganas de vivir. Gracias a su ejemplo, yo también di mi “sí” a Dios. En el camino comunitario recibí los Sacramentos de la Comunión y de la Confirmación. 

Ayudar a otros como «ángel de la guarda»

»Más adelante comprendí lo que es ser responsable por la vida de otro, cuando por primera vez fui “ángel custodio” de un chico joven: lo que había recibido tenía que entregarlo. También me hizo ver muchas faltas mías: poca paciencia, la falta de respeto, mucha inseguridad y apuro. Entendí que todavía no llegué a ninguna parte y que siempre hay algo para aprender, aún del joven que acaba de entrar.

Mi padre, feliz

»Cuando fui a casa para la verificar, después de dos años de camino, tuve una experiencia conmovedora y profunda: por primera vez vi a mi padre llorar de alegría y no de dolor; me liberó de muchos sentimientos de culpa que tenía por todo el mal que había hecho.

«Hoy soy feliz»

»Hoy estoy muy contento de que Dios me haya llamado a la Comunidad y agradezco de corazón a mi familia, a Madre Elvira, a todos los sacerdotes y personas que encontré en mi camino: ¡hoy soy un hombre feliz de vivir!».

Más información: Comunidad del Cenáculo

Teología pura y poesía en imágenes

El Árbol de la Vida, de Terrence Malick: teología pura y poesía en imágenes

Creación, tentación, caída, redención, el mal y el perdón, la esperanza… y Dios, y aún más asombroso, el Cielo. Una explosión de luz en nuestra cultura ácida.

Pablo J. Ginés

El Árbol de la Vida, de Terrence Malick, fue noticia en España porque, contra todo pronóstico, consiguió liderar la taquilla hace dos semanas. Una película de autor, espiritual, con saltos narrativos, voluntad poética, teología en imágenes, ritmo pausado y larga, muy larga (2 horas 18 minutos) se colocaba como la número uno, quizá por el atractivo de los nombres de Brad Pitt y Sean Penn en su cartel. Luego llegó la normalidad y el espectador de cine «rápido» supo por sus amigos que ésta no era su película, pero sin embargo otro tipo de espectador, más reflexivo, acudió a ver el fenómeno, y entre ellos muchos cristianos que nunca habían visto nada igual en el siglo XXI.

Malick, un hombre que protege su vida privada con férrea determinación, gastó 32 millones de dólares en rodar esta película. En Estados Unidos sólo recaudó 13,2 millones, pero en el resto del mundo ha conseguido 41 millones de dólares (3,8 en Italia, 2,5 en Rusia, 8,9 en Francia, 2,7 en Reino Unido; 6 millones en Japón). Eso significa que ha hecho una obra maestra, que ha llegado a todo el mundo y a muchas culturas y que cubre gastos de sobra.

Como en sus anteriores películas (la última, de estilo reconocible, fue El Nuevo Mundo), recurre a un intenso amor por la naturaleza, al bosque, el verde, los árboles como elemento de continuidad y a la voz en off. Sus críticos le reprochan que recurre a las palabras, no a la cara de los autores, para transmitir sentimientos. 

Quizá se equivocan: Malick transmite sentimientos con sus imágenes de la naturaleza, pero con las palabras transmite pensamientos, ideas, conceptos. Por eso, las palabras, dosificadas, son importantísimas… y la mala traducción al español es culpable de varias confusiones. La primera, nada más empezar, con la cita del capítulo 38 de Job (no del «versículo», como dice la traducción): «¿Dónde estabas tú mientras yo ponía los cimientos de la tierra, cuando las estrellas del alba cantaban a coro y exultaban de gozo todos los hijos de Dios?»

Esta cita lo enmarca todo: Job sufre, pese a que ha sido bueno se suceden las desgracias en su vida. Y se enfada con Dios, le parece injusto. Dios responde con esa frase que pone todo en un contexto: Dios y su obra son enormes, y sin ver el cuadro general no se entiende la dura pincelada del dolor del inocente.

Así que Malick desarrolla esto: el dolor del hombre es real, es concreto, es escandaloso. Pero el contexto de Dios es enorme, y como dice la madre (las monjas se lo enseñaron), hay dos dimensiones: la vía de la naturaleza (que se refiere a sí misma, a las pasiones, al yo) y la vía de la gracia (no de la «divinidad», como tristemente traducen en español) que apunta al tú.

Lo dice al principio de todo… y lo consuma al final de la película cuando por fin se rinde, sale del yo y va al gran Tú que es Dios: «yo te entrego a mi hijo», dice ella, algo que toda madre ha de aprender. Porque lo que no se da (a Dios o al otro, que es imagen de Dios), se pierde. Es la ley de la naturaleza.

Durante veinte minutos vemos en la película planetas que se funden cayendo en un sol. Vemos la gloria de los dinosaurios… para desaparecer enseguida por efecto de una piedra, un meterorito. Planetas y especies son un soplo, todo pasa. Sólo el alma, la persona, es eterna.

La postura del hombre ante el dolor y la inevitable desaparición llevan a Dios desde las primeras imágenes. De nuevo, las palabras dan la clave. «Te conocí gracias a mi madre y a mi hermano», dice la voz de Sean Penn, en esa oscuridad con colores que es Dios. Veremos desplegarse la historia de su personaje desde que era niño, que es la historia de la humanidad. Él vivirá en un paraíso, una infancia con amigos y hermanos y naturaleza, si se ve con la vista de la gracia.

Como Eva, será tentado: «los padres no quieren que sepamos, nos ocultan cosas, cómo vas a saber si no lo experimentas por ti mismo», le dice un niño anónimo, casi sin rostro, como cabe esperar del mal, del Tentador. Nuestro joven protagonista entra en una casa ajena, roba un camisón de lencería femenina, huye, busca esconderse, lo tira al río… «¿Qué he hecho?», solloza. Ha pecado, ha desobedecido, ha roto la confianza que había sobre él. Es la Caída.

Y luego daña a su hermano rubito, dulce, con una escopeta de balines: es Caín y Abel. Pero el hermano le perdonará… por eso podrá decir que conoció a Dios gracias a su hermano, gracias al perdón. Él le conducirá a una vida nueva.

Otro error de la traducción al español está en que en esta versión el padre castiga a su hijo cuando no le llama «señor». Eso puede hacer pensar al espectador que uno de los hijos es adoptado. Pero no es así: en la versión inglesa, el padre pide ser llamado «padre» y no «papá». Quiere que los niños sean fuertes, duros, que cumplan sus objetivos. Este padre es pelagiano: quiere salvarse por su eficacia, cumpliendo planes y obras. Necesita ser apreciado por lo que hace, no por ser quien es. Sólo al final llegará a entender la vida de la gracia, que encarna su esposa, pura celebración, amor, alabanza. «Me perdí la gloria», se lamentará él. Y la gloria, ¿qué es sino la alegría del Cielo, que empieza con gozar de la bondad y belleza ya en la tierra?

El niño que llegará a ser el personaje de Sean Penn se rebelará contra el padre, igual que el hombre contra Dios. «¿Por qué nuestro padre nos hace daño?», se pregunta. Que es la pregunta de Job sobre el dolor. Pero también habrá una reconciliación entre padre e hijo.

¿Y dónde está Cristo? Nadie lo menciona con palabras,pero está en las imágenes. «Venid, benditos de mi Padre, porque tuve sed, y me disteis de beber», dice Cristo. La madre da de beber a unos presos que caminan con cadenas, casi un homenaje a la escena en que Ben Hur da de beber a Cristo en el pozo. «¿Le puede pasar a cualquiera?», pregunta el hijo al ver a los hombres encadenados. La respuesta es: ¡le pasó a Cristo! Lo vemos encadenado en las vidrieras de la iglesia a la que acude la familia en domingo. El cura predica a Job y recuerda que nadie, ni los buenos, están a salvo del dolor. Él no lo menciona, pero Cristo es el paradigma: fue el más bueno, y sufrió. ¿No es esa la mitad de la respuesta a Job? ¡Dios no mira de lejos, Dios sufre con nosotros, es uno de nosotros! Cristo es el hombre que al Señor le llama «papá».

La otra mitad de la respuesta está más allá: este mundo, con sus galaxias en espiral, es pasajero. Luego está el resto de la gloria, el reencuentro con los seres queridos. Esta vida es vida pero no es toda la vida. «Brille para ellos la luz perpetua», canta el coro, con un sol en el centro de la pantalla, bajo, mientras llegan los santos. Es el descanso al final del día. Porque todos ellos han sido santos, se han arrepentido, han crecido, han aceptado. El que fue niño rebelde llega a Dios siguiendo a su hermano, pasando por un paraje desértico: el Purgatorio. En el Cielo hay agua (las aguas del parto, las del bautismo, las que originaron la vida biológica) y -contra la estupidez de Sartre- en el Cielo están los demás.

Y la promesa es para nosotros, y nuestros hijos, y los hijos de nuestros hijos. No hace falta vivir en la Texas rural. Los edificios de cristal de Nueva York, gloria del hombre tecnológico… ¿qué hacen sino reflejar el cielo azul? El puente final, ¿a donde conduce, sino al cielo? Los girasoles, ¿qué miran, si no es el sol eterno? Incluso en el cemento de la calle en obras, hay un árbol. Árboles por todas partes, como en El Nuevo Mundo, en contrapicado: nos obligan a mirar arriba para ver su belleza, pero más arriba hay más belleza aún, el Cielo. «¿Ves? Allí vive Dios», profetiza la madre.

Malick llena de significado cada imagen. Su magnífico director de fotografía, Emmanuel Lubezski, merece tantos premios como sea posible concebir. El uso de la música es magistral y emotivo. Todos los actores están soberbios, especialmente los niños.

Es difícil no pensar en Tolkien. ¿No es su mitología, narrada en El Silmarillion, en La Canción de los Ainur, un desarrollo de Job 38? En su creación del mundo, los ángeles cantan y lo que cantan es lo que Dios crea. «¿Dónde estabas tú mientras yo ponía los cimientos de la tierra, cuando las estrellas del alba cantaban a coro y exultaban de gozo todos los hijos de Dios?», dice Dios a Job. He ahí el principio.

¿Y el final? Tolkien lo explicó en una carta 4 años antes de morir. «Puede decirse que el principal propósito de la vida es incrementar, de acuerdo con nuestra capacidad, el conocimiento de Dios y ser movidos por él a la alabanza y la acción de gracias. Hacer como decimos en el Gloria in Excelsis: te alabamos, te bendecimos, te adoramos, proclamamos tu gloria, te damos gracias por la grandeza de tu esplendor. Y en los momentos de exaltación podemos invocar a todos los seres creados para que se nos unan en el coro hablando en su nombre, como se hace en el salmo 148, y en el Canto de los Tres Niños en Daniel II: alabad al Señor… todas las montañas y las colinas, todos los huertos y los bosques, todas las criaturas que reptan y los pájaros que vuelan».

Que es lo que ha hecho Malick. Una sinfonía de exaltación, «invocar a todos los seres creados para que se nos unan en el coro».

 

Santa Faustina Kowalska Doctora de la Iglesia

Difusora de la devoción de la Divina Misericordia

Cardenales y obispos impulsan que Santa Faustina Kowalska se convierta en Doctora de la Iglesia

La santa polaca sería la cuarta mujer proclamada Doctora de la Iglesia, la primera del tercer milenio.

Actualizado 5 octubre 2011

Anita S. Bourdin/Zenit

Santa Faustina Kowalska podría ser la primera doctora de la Iglesia del tercer milenio: los cardenales y obispos reunidos en Cracovia-Lagiewniki para el 2º congreso mundial de la Divina Misericordia han dirigido una carta a Benedicto XVI pidiendo la apertura del dossier.

La noticia fue difundida en directo este domingo 2 de octubre, después del Ángelus de Benedicto XVI, por Radio Espérance que transmite el congreso por sus emisoras, por el satélite WorldSpace y por internet.

La santa polaca Faustina Kowalska sería la cuarta mujer proclamada doctora de la Iglesia, después de la carmelita española Teresa de Ávila y la dominica italiana Catalina de Siena, proclamadas por Pablo VI, y Teresa de Lisieux, proclamada por Juan Pablo II.

Su enseñanza está considerada especialmente importante para el tercer milenio y se conoce en el mundo entero gracias a su “Pequeño diario”.

Después del Ángelus, en la plaza de San Pedro, Benedicto XVI dirigió un mensaje a los cerca de dos mil participantes en este congreso, haciendo referencia a su tema.

“Muy queridos, reforzad vuestra confianza en el Señor a través de la reflexión común y la oración para que llevéis eficazmente al mundo el alegre mensaje de que “la Misericordia es fuente de esperanza”, les exhortó.

Después del mensaje difundido en la basílica de la Misericordia de Lagiewniki, consagrada en 2002 por Juan Pablo II, se leyó a la asamblea una carta de agradecimiento, escrita en italiano.

Los obispos presentes –entre ellos los cardenales Dziwisz, Macharski, Rylko, Backis, Barbarin, Schönborn, Zen-, firmaron esta carta, en la que dieron las gracias también al Papa Benedicto XVI por la beatificación del “servidor de la Misericordia” Juan Pablo II.

Pero añadieron una petición: que permita la apertura de la causa del “doctorado” de santa Faustina, lo cual ayudaría a promover en el mundo el mensaje de la Misericordia divina.

El arzobispo de Cracovia, el cardenal Stanislas Dziwisz, anunció que se propondría a los participantes del congreso firmar la petición a favor del doctorado. Esta petición irá extendiéndose poco a poco por todo el mundo.

El bestseller que popularizó a sor Teresita

«¿Qué hace una chica como tú en un sitio como éste?»

Jesús García presenta hoy en Madrid el bestseller que popularizó a sor Teresita

Entrevista con el autor revelación de la literatura espiritual en España de su exitosa obra que recoge diez sorprendentes testimonios de religiosas de clausura.

Actualizado 6 octubre 2011

Gilberto Pérez/ReL

Se ha convertido en uno de los autores revelación de la literatura espiritual en España a principios del siglo XXI. Sus dos primeras obras, Medjugorje y ¿Qué hace una chica como tú en un sitio como éste?, han alcanzado la etiqueta de Best Seller en muy poco tiempo, y el beneplácito tanto de crítica como de lectores.

Responde al nombre de Jesús García, y no es teólogo ni religioso, y sin embargo, parece haber dado con las claves del éxito en literatura religiosa en su última obra, ¿Qué hace una chica como tú en un sitio como este?, que ha superado las cuatro ediciones en apenas cuatro meses. Su título anterior, Medjugorje, alcanzó seis en dos años.

De esto y mucho más hablamos con él en esta entrevista momentos antes de la presentación de su obra que tendrá lugar esta tarde a las 20:00 horas en el Colegio-Fundación Caldeiro (Avenida de los Toreros, 45, Madrid).

-¿Se esperaba que esta obra, un libro de monjas, funcionase tan bien?
-Pues en cierta manera sí, porque así funcionan las cosas de Dios. Este libro está lleno de Dios por todas partes, y eso se va viendo a medida que va tomando forma. Yo se lo comentaba a mis amigos, que iba a ser un bombazo, y así está siendo. De todos modos, creo que esa pregunta está hecha en clave empresarial, y para mí el éxito de ventas es un éxito efímero, importante para según qué cosas, entre otras para que te sigan editando y seguir pudiendo anunciar a Dios, pero en ningún caso trascedente ni definitivo. Es cierto que es una alegría saber que diez mil personas han pagado veinte euros por uno de tus libros, pero me siento como un actor de reparto en este trabajo, como un extra que pasaba por allí y le dan un bote y un bocadillo.

-Si usted es un extra, ¿quién es el actor principal, o el director y el productor?
-Bueno, la productora debe de ser la editorial, que ha confiado en este trabajo. Pero el Director le aseguro que es Dios, no tiene otra explicación. Estas cosas pasan cuando decides dejar tu vida en manos de Dios. Él es así, que te sorprende con cosas como esta. Resulta que escribes un libro sobre monjas, que es el asunto menos mediático del mundo, y se vende como churros. Además lo haces sin ser teólogo, ni religioso, ni cura, siendo una persona muy normal, que estudió en un colegio de Vallecas y que nunca fue a la Universidad. Me encanta la pedagogía de Dios, de verdad.

Luego, después del Director, que es Dios Padre, este libro tiene un actor principalísimo, que es Cristo. Este es un libro cristocéntrico, pues la diez monjas que participan en él, no paran de hablar de Cristo. Sin Cristo no se entendería la vida de ninguna de ellas. Cristo las ha arrebatado el corazón para darles una vida plena, alegre, para darles un amor arrollador. Cristo es una persona que, misteriosamente, sigue viva. Yo entiendo que para el que no tenga fe, esto es una locura, pero ellas, las monjas, son testimonio vivo de que esto es así, y lo explican muy bien en el libro.

Después de Cristo, habría otras diez actrices que son las diez monjas. Así que figúrese. No soy más que un extra. Eso sí, el que sale en el mejor plano de la peli. Eso que me llevo.

-Al hilo de la pregunta anterior, ¿cual es para usted el auténtico éxito de este libro?
-En el plano personal, sencillamente el haber respondido, con mi desorden y pereza, a una inquietud sembrada por Dios. Nadie se levanta una mañana de martes y dice: “Hombre, voy a escribir un libro de monjas”, y lo hace. No, es una inquietud que va cogiendo forma en la oración y en los aconteceres que te presenta Dios.

Y luego, el ver que es un libro que, según dicen quienes lo leen, abre una puerta entre el lector y Dios. Da a conocer una realidad de Dios a gente que no la conocía, y eso es una pasada, se lo aseguro. Porque veo que Dios actúa en mí tanto como en los lectores y en las monjas. Que yo soy su actor principal para su película sobre mi vida, y es capaz de hacer cosas como esta para que yo me sepa protagonista de su historia de salvación por mí. Eso te lleva a Él, le conoces más y cuando le conoces, te enamoras de Él. Todo el tema de la encarnación de Dios, su asesinato en la cruz y todo lo que pasó con Él, cobra un sentido absoluto para ti, y te cambia la vida.

Para terminar, también está siendo muy satisfactorio ver que este libro está ayudando mucho a los familiares de un montón de monjas, a acoger con paz y confianza lo que les ha pasado a sus hijas, sus amigas, a sus hermanas… Eso es una alegría que te pone los pelos de punta, de verdad.

-¿Se han leído el libro las protagonistas?
-Pues no todas, la verdad, y no me extraña, porque ellas ya saben de qué va.

-Cuéntenos algo de ellas, alguna anécdota que no sale en el libro
-No, por ahí no paso. Hay muchas anécdotas, pero lo que se tiene que saber de ellas, ya está escrito y es público. Son anécdotas personales que tienen mucho que ver con el afecto personal que nos hemos cogido. Yo ahora las quiero como a mis hermanas, y ellas a mí como a un hermano que necesita de ellas, de su vida, de sus oraciones y de sus sacrificios, pero es verdad que nos hemos reído mucho, y sobre todo, que hemos crecido hacia Cristo. Las monjas, ahí donde las ves, pueden ser muy atrevidas a la hora de explicarte a Cristo, y muy divertidas también.

-¿Qué es una monja?
-Para empezar, una mujer. Una mujer con todo lo que conlleva: su afectividad, su sensibilidad, su instinto maternal, su atención extrema para algunas cosas y sus despistes para otras. No saben leer los mapas, como todas, pero saben leer los corazones y las miradas mucho mejor que nosotros.

Luego, son mujeres enamoradas, con todo lo que ello conlleva. Se han enamorado de Cristo, y se desvelan por Él cuando nace el enamoramiento, ansían estar delante de Él, compartir con Él. La diferencia está en que no tienen una experiencia tangible de Cristo como lo tendrían de su novio o marido. Pero por eso creo que todo esto es auténtico, porque si no, no sería posible. Ellas nos son unas locas o unas chicas que no tenían nada que hacer. Ni mucho menos. ¿Era Teresa de Calcuta una pobrecilla desgraciada? ¿Era Teresa de Jesús una tonta que no sabía lo que hacer con su vida? Me parto de risa con quienes sostienen cosas como estas. Hace falta ser muy corto de miras para decirlo.

Luego, son unas mujeres que, como todas, tiene sus épocas mejores y peores, pero al menos las que yo he conocido para este libro, son sencillamente mujeres enamoradas que han dado su vida a un hombre vivo, que es Dios en la persona de Cristo. No a un muerto, sino a un vivo.

-¿Pero no negará que no todas las vocaciones son auténticas?
-Ni todas falsas. Y si no son todas falsas, con que solo una sea auténtica, es que Dios existe. Además, en otros tiempos, no lo sé, porque no los he vivido, pero hoy en día las vocaciones son muy auténticas, porque nadie te da nada por ser monja en este mundo de hoy. Dicen que hay crisis de vocaciones porque hay menos que en otros tiempos. Pues yo creo que la crisis es que no sean vocaciones auténticas, como dice usted. Lo bueno es ver que las que hay, sean muchas, pocas o poquísimas, son auténticas, y ahora hay mucha monja muy auténtica, convencida de Cristo, de su vocación y de su vida, cuya vocación ha sido probada y discernida con experiencias de vida como el noviazgo, el éxito profesional, el mundo y todo lo que les rodea. ¿Crisis de vocaciones? Y una leche, con perdón. En España hoy hay unas setecientas mujeres de entre 17 y 35 años, felices a rabiar siendo monjas de clausura o de realidades muy entregadas. ¡Pero son mujeres felices, plenas! No me mire así, que tengo datos.

-¿Nos puede dar una pista?
-En el noviciado de las Hermanas de la Cruz, en Sevilla, hay setenta chicas. ¡Setenta novicias en una de las órdenes más estrictas de la Iglesia! Y en Sevilla, con el calor que hace… En Iesu Communio, las menores de treinta y cinco años son cerca de 180. En las Reparadoras de El Escorial, ya son unas setenta las jóvenes, cien con las menos jóvenes. Las Clarisas de Soria son cien, en cuatro conventos diferentes, y las Hermanas de Belén, son unas cincuenta las jóvenes. Si quieres te hablo de la Hermanitas del Cordero, de las Servidoras del Señor y la Virgen de Matará, o de las Hijas de Santa María del Corazón de Jesús, las café con leche de Galapagar. O las Reparadoras del Corazón de Cristo Sacerdote, un montón de chicas jóvenes que rezan que te caes, que adoran de rodillas todo el día y la noche también, y que por cierto, visten con hábito vaquero desde treinta años antes que las Iesu Communio.

-¿Qué vistan de vaquero responde a un intento de acercarse a gente joven?
-Eso es una estupidez. Visten de vaquero porque es lo más barato y lo más fácil de hacer. ¡Y porque les da la gana y punto! Pero entiendo su pregunta. ¡Es importante! La gente que está fuera de la Iglesia necesita que detalles como éste se los expliquemos, porque choca ver a una monja vestida con hábito vaquero. Simplemente porque no saben. Lo malo, lo sangrante, es que comentarios como ese vengan de los nuestros, y han venido muchos a colación de esto. Qué razón ha tenido el Papa al decir en Alemania que un agnóstico puede estar más cerca de Dios que el creyente rutinario.

-Hablando del Papa, él tiene uno de sus libros
-Sí.

-¿Cómo consiguieron hacérselo llegar?

-Yo no conseguí nada, no me lo propuse yo, ni se lo propuso nadie. De hecho, comenté hace poco con Alex Rosal, el editor, que si nos hubiésemos propuesto hacerle llegar un libro al Papa, habríamos celebrado tres o cuatro reuniones con todo tipo de contactos y de “expertos”, y no lo hubiésemos logrado. Sin embargo, tú no haces nada y se desencadenan un montón de circunstancias que tú no controlas, y cuando te das cuenta, sale el Papa en la tele con uno de tus libros.

-¿Qué sintió?
-Una alegría enorme. Sobre todo por lo inesperado, ya le digo que ni se me pasó por la cabeza algo así. Al editor le he dicho que ya no puedo escribir más, porque no sé a quién vamos a llegar ya después del Papa.

-¿Cómo fue que le llegó el libro a Su Santidad?
-Eso se lo debo a sor Teresita, un amor de mujer a la que le debemos mucho todos, también los que no la conocen. Es la última protagonista del libro, la monja de 104 años que ingresó en su monasterio el 16 de abril de 1927, el mismo día que nació Joseph Ratzinger. Fue invitada por la nunciatura a saludar al Papa y ella le llevó uno de mis libros firmado por ella.

-Ninguno de sus dos libros tiene el Imprimatur ni el Nihil Obtat, los permisos que certifican que la obra no contiene nada contrario a la doctrina ¿Por qué?
-Muy sencillo: porque no lo he pedido. No es necesario pedirlo. Si lo fuese, lo haría, pero no es necesario.

-¿Pero siempre es una garantía y abre más puertas?

-Una garantía para usted, que está en la Iglesia, pero para quienes no lo están, les importa un bledo, y yo escribo más para los que nos miran con asombro desde fuera, que para los que ya estamos dentro. No hace falta y es dedicar más tiempo. Si fuese necesario, lo haría, pero si no lo es, no seré yo más papista que el Papa.

-¿Puede explicar un poco mejor esto de escribir para los de fuera?
-Claro que sí, verá. En la Iglesia, muchas veces damos demasiadas cosas por supuestas, y en muchísimas ocasiones hablamos un lenguaje que no entiende ni el tato. Esto es paradójico, porque el Evangelio es universal, es una llamada a la conversión del corazón, hacia Dios, para todos los hombres, y a veces hablamos un lenguaje que no entiende ni nuestro vecino, ni nuestra cuñada. A veces tengo la sensación de que pescamos en una pecera. Y mire, es cierto que es necesario alimentar a los peces de la pecera, pero para mí es aburrido. El reto es echar las redes en mar abierto, ir a programas de televisiones ajenas a nuestra doctrina y forma de vida, escribir en periódicos de línea editorial opuesta, publicar libros en editoriales generalistas, que se distribuyen en librerías no espirituales, y así dar testimonio alegre y convencido de que lo nuestro no es solo para nosotros, sino para todos. Hablando en plata, es muy fácil hablar en Radio María o en COPE, y siendo muy necesario cuidar de las 99 ovejas del redil, lo que a mí me entusiasma a rabiar es salir a por la oveja que se ha perdido. ¿Sabe por qué?

-Dígamelo usted.
-Porque yo fui la oveja perdida y hubo quien vino a por mí. Una cosa es mirar desde lo alto del pozo a quien esté en el fondo, y otra meterse y sacarle.

 

 

 

Muere Steve Jobs, fundador de Apple

María Ramírez (corresponsal ) | Nueva York

Actualizado jueves 06/10/2011 17:23 horas
Steve Jobs, uno de los fundadores de Apple y figura imprescindible para entender la evolución de la tecnología en las últimas décadas, ha fallecido esta noche a los 56 años, según ha anunciado la compañía.

Murió en Palo Alto (California), acompañado por su esposa y otros familiares. El revolucionario del garaje, el gurú que ha obsesionado a una generación de jóvenes y ha cambiado la manera de llamar, leer el periódico y hacer fotos, ya es un mito.

«Apple ha perdido a un genio visionario y creativo y el mundo ha perdido a un asombroso ser humano», ha informado la empresa a través de un escueto comunicado en su página web. «Aquellos que hemos tenido la suerte de conocer y trabajar con Steve hemos perdido a un querido amigo y a un mentor. Steve deja atrás una compañía que sólo él podría haber construido y su espíritu estará siempre en la base de Apple», añade la nota de la compañía, que ha incluido una fotografía de Jobs en su página de inicio a modo de homenaje.

También su familia ha confirmado la noticia a través de un comunicado en el que expresa su «profundo agradecimiento» por la muestras de condolencia y apoyo que han recibido. El emotivo texto indica que el cofundador de Apple murió «rodeado de sus familiares». «En su vida pública Steve era un visionario, en su vida privada se dedicó por completo a su familia». Los familiares también han indicado que se ha puesto en marcha en la web de Apple un espacio para que los seguidores puedan envíar sus condolencias y rendir tributo a Jobs.

La empresa anunció la muerte de su fundador, pero no informó sobre las causas. Jobs se retiró oficialmente a finales de agosto después de varios años de liderazgo intermitente por un cáncer de páncreas, que convirtió incluso en un motivo de inspiración.

‘Acordarme de que voy a morir pronto me ayuda a tomar las decisiones’

“Si vives cada día como si fuera el último, algún día acertarás… Cada día me miro al espejo como si fuera el último”, dijo en 2005 en un discurso de graduación en la Universidad de Stanford. “Acordarme de que voy a morir pronto me ayuda a tomar las decisiones…Acordarse de que vas a morir es la mejor manera de evitar la trampa de pensar que tienes algo que perder. Ya estás desnudo, no hay razón para que no sigas tu corazón…Tu tiempo es limitado, no lo desprecies”, dijo.

A lo largo de 2011, Steve Jobs fue visto en varias ocasiones en centros para pacientes de cáncer, si bien nunca se confirmó que se le hubiera reproducido la enfermedad. En 2011 se prodigó muy poco públicamente y reapareció para la presentación del iPad 2 el pasado mes de marzo, un evento en el que fue recibido con una sonora ovación y en el que se mostró extremadamente delgado.

Jobs, visionario, detallista, trabajador, pero también egocéntrico y gritón, se resistía a abandonar la empresa a la que se dedicó con atención minuciosa, pero el último año había tenido que resignarse a estar ausente. Llevaba ocho meses de baja oficial desde enero y apenas aparecía por el campus de la empresa. Tras su dimisión como consejero delegado, aún prometía asesorar sobre las estrategias de futuro, con su halo especial.

La obsesión de Cook es mantener ahora el mito de que Apple no es una empresa más. “Juntos seguiremos haciendo de Apple el lugar mágico que es”, dijo en su primer e-mail a los empleados tras el traspaso de poderes.

‘Transformó nuestras vidas’

Las reacciones a la muerte de Steve Jobs no han tardado en producirse. Su sucesor en la máxima dirección de la empresa, Tim Cook, ha declarado tras conocer el fallecimiento que «Apple ha perdido a un visionario y a un creador genial y el mundo a un ser humano increíble».

Sus mayores competidores alababan el talento único del visionario. “Es muy poco habitual encontrar a alguien en el mundo que tenga el impacto profundo que Steve ha tenido, con efectos que se sentirán durante muchas generaciones”, dijo Bill Gates, su rival en Microsoft, en un comunicado.

Tampoco es habitual que la muerte de un empresario provoque una declaración tan cariñosa de la Casa Blanca. “Era lo suficientemente valiente para pensar diferente, lo suficientemente atrevido para creer que podía cambiar el mundo, y lo suficientemente talentoso para hacerlo”, aseguraron Barack y Michelle Obama en un comunicado. Obama alabó a Jobs por “poner Internet en nuestros bolsillos”, aunque el presidente sea más de la competencia (es el primer ocupante de la Casa Blanca en tener Blackberry).

“A Steve le gustaba decir que vivía cada día como si fuera el último. Y gracias a que lo hizo, transformó nuestras vidas, redefinió industrias enteras, y consiguió algo muy raro en la historia humana: cambió la manera en cada uno de nosotros ve el mundo”, dice la declaración de los Obama, que envían sus condolencias no sólo a su familia, sino también “a aquellos que lo amaban”.

Entre los que han vivido los cambios está Rupert Murdoch, el jefe del imperio mediático americano-británico-australiano. “Steve Jobs fue simplemente el mejor consejero delegado de su generación. Aunque estoy muy triste por su muerte, recuerdo el espectacular impacto que ha tenido al revolucionar la manera en que la gente consume medios de comunicación y entretenimiento”.

Genio revolucionario e inconformista

Steve Jobs está considerado el impulsor del éxito de Apple y el autor intelectual de los productos que llevaron a lo más alto a la compañía, entre ellos el teléfono móvil iPhone, el reproductor de música iPod o la tableta iPad.

En 1976 fundó la compañía junto a Steve Wozniak y Ronald Wayne, y jugó un papel fundamental en la revolución de los ordenadores personales. En 1985 fue expulsado de la empresa, lo que provocó una caída en los ingresos de Apple, que se revirtió sólo con su regreso en 1996.

Durante el periodo en el que estuvo alejado del entorno de la manzana, en 1986, Jobs compró una división de animación digital al cineasta George Lucas por diez millones de dólares, la rebautizó Pixar y la convirtió en el estudio de animación más exitoso del mundo. Luego se lo vendió a Disney por 7.400 millones de dólares.

Además fundó ‘Next Computers’ para concretar su visión de ordenadores personales poderosos pero elegantes. A pesar de que fue un fracaso comercial, el científico Tim Berners Lee utilizó uno para crear la world wide web (www). Jobs vendió luego la compañía a Apple, donde su tecnología fue la base para el actual sistema operativo de Apple.

Cuando Jobs fue recontratado como jefe ejecutivo de Apple revitalizó la compañía con el iMac, un colorido ordenador de una pieza. Delineó una estrategia para convertir a los productos de Apple en el centro de un estilo de vida digital que estaba emergiendo.

A pesar de que fue superado estratégicamente por su gran rival Bill Gates, de Microsoft, Jobs mantuvo la misma visión digital con la que comenzó, que sostiene que para que los ordenadores lograran su rendimiento óptimo Apple tenía que mantener el control tanto del hardware como del software. Finalmente esta pertinaz insistencia fue la base de su éxito posterior.

Apple lanzó el iPod en 2001 y en 2003 la tienda online de música de iTunes, que en siete años vendió más de 10.000 millones de canciones y dominó completamente el negocio de música online.

El siguiente gran éxito de Jobs fue el iPhone, lanzado en 2007, que revolucionó el mercado de smartphones y está previsto que alcance un total de 100 millones de unidades vendidas para fin de año. La compañía lanzó el iPad en 2010, lo que generó una demanda sin precedentes para tablets y del que se han vendido más de 25 millones de unidades hasta el momento.

Este verano, Apple sobrepasó a Exxon como la empresa con mayor capitalización del mundo, unas tres veces Telefónica, la mayor española. Cuando salió a bolsa en 1980 una acción costaba, según su precio ajustado, lo que hoy serían unos dos euros. Ahora cada una vale más de 280 (377 dólares).

La conversión «in extremis» de John Wayne a la fe católica

Matthew Muñoz, de la diócesis de Orange (EE.UU)

El nieto sacerdote de John Wayne cuenta la conversión «in extremis» del vaquero a la fe católica

Poco antes de su muerte, la estrella de los « westerns» se entristeció de no haberse convertido antes. «Desgraciadamente -le dijo a su nieto- he tenido una vida demasiado ocupada».

Actualizado 4 octubre 2011

Mauro Pianta/Vatican Insider

El “gringo” era un hombre de fe. Y, además, de fe católica. Y fue justamente así: John Wayne(pseudónimo de Marion Mitchell Morrison), el actor que interpretó el papel del pistolero duro en centenares de ‘westerns’, un año antes de afrontar su “último duelo”, el que combatió contra el cáncer de estómago que lo mató en el verano de 1979, se convirtió al catolicismo.

Lo recuerda en una entrevista con la agencia estadounidense Cna uno de los nietos del actor,Matthew Muñoz, sacerdote de la diócesis de Orange, California. El sacerdote, de 46 años, es hijo de Melinda, una de los cuatro hijos que el “duque” tuvo con su primera esposa Josephine Saenz. En 1945 se divorció de ella y se volvió a casar otras dos veces, siempre con latinas. «Mi abuela era católica –dijo Muñoz– y, desde el divorcio hasta la muerte de su marido, nunca se volvió a casar. Y nunca dejó de rezar por la conversión del abuelo».

Oraciones que parecen haber funcionado en 1978.

John Wayne, cuya familia era presbiteriana, tenía óptimas relaciones con Tomas Clavel, arzobispo de Panamá. El preladosiempre lo animaba para que se conviertiera a la fe católica. «Un día, en 1978 –recuerda el nieto–, mi abuelo lo llamó y le dijo: “Ok, estoy listo”. Sin embargo, el obispo estaba muy enfermo. No podía moverse. Pero envió a su sucesor, el arzobispo Mc Graith, a Hollywood. Mi mamá y mi tío estaban esperando la llegada del arzobispo. Y estuvieron presentes cuando mi abuelo recibió el bautismo».

¿Cómo era realmente este «vaquero»?

Pero, ¿qué tipo de hombre era el “duro” por antonomasia de Hollywood? «Recuerdo –respondió el nieto– las visitas a su casa: me hacía jugar y me divertía mucho. Un abuelo de verdad. Muy diferente de la imagen que habían creado sobre él…».

En cuanto a la conversión “in extremis”, Muñoz dijo: «Poco antes de su muerte, el abuelo se entristeció de no haberse convertido antes. Desgraciadamente, me dijo, he tenido una vida demasiado ocupada».

El nieto subraya que en realidad John Wayne nunca fue un enemigo de la religión. «Sus padres le habían inculcado los principios de la Biblia: él mismo escribía cartas muy dulces a Dios. Para algunos, eran cartas ingenuas; yo creo que estaban llenas de una sabiduría profunda». 

la JMJ 2015 en la tierra del beato Juan Pablo II

Su competencia es Letonia

Se estudia la posibilidad de que la JMJ 2015 sea en la tierra del beato Juan Pablo II

Polonia podría convertirse en la sede del encuentro internacional de los jóvenes católicos, como un homenaje a Juan Pablo II en el décimo aniversario de su muerte.

Actualizado 30 septiembre 2011

Giacomo Galeazzi/Vatican Insider

Si Kracovia pretende ser la sede de la JMJ 2015, tendrá que competir con Letonia, aunque la candidatura polaca parece tener todas las de ganar.El cardenal Stanislao Dziwisz habló de la cuestión con el Papa Ratzinger y le invitó a bendecir el santuario de la Divina Misericordia de Kracovia. El Pontífice respondió: «Veremos».

En 2015, décimo aniversario de la muerte de Karol Wojtyla, la Jornada Mundial de la Juventud podría transformarse en un colosal homenaje a su inventor. Comienza a tomar forma la hipótesis de una JMJ en Polonia, la tierra de Juan Pablo II, que fue el inventor de los encuentros planetarios de los “Papa boys”. El cardenal Dziwisz, brazo derecho de Karol Wojtyla en Polonia y en el Vaticano, está trabajando arduamente, tanto en su patria como en la Curia, para lograr que la JMJ de 2015 pueda desarrollarse en Kracovia. Benedicto XVI, que hace cuatro meses elevó a los altares a su predecesor, no dijo que no a la propuesta del arzobispo polaco. «Espero que después de Río de Janeiro, la juventud del mundo se encuentre en Kracovia, en el santuario del Beato Juan Pablo II».

El cardenal Dziwisz tiene un argumento a favorpara convencer a la Santa Sede: dentro de cuatro años, en 2015, se celebrará el 10 aniversario de la muerte de Wojtyla. Será la Conferencia episcopal polaca la que invitará oficialmente a Benedicto XVI. «La Jornada Mundial de la Juventud representa una enorme oportunidad para promover a la ciudad de Kracovia –comenta el periódico “Dziennik Ploski”. La JMJ también puede hacer un aporte económico sustancial, como demuestran los 160 millones de euros que, según los organizadores, quedaron en las aras de Madrid gracias al último encuentro de los jóvenes».

La preocupación: Letonia

Según lo que indica la Radio Vaticana, también Letonia «entrará en la competencia para tener el privilegio de hospedar el evento en 2015». Que la JMJ hiciera una etapa en Kracovia significaría homenajear a su creador. Todo comenzó, de hecho, el domingo de Palmas del 31 de marzo de 1985; miles de jóvenes de todo el mundo se reunieron en Roma para celebrar con Juan Pablo II el Año Internacional de la Juventud. La cantidad de jóvenes es sorprendente. Se calcula que fueron, por lo menos, 250.000 los que llenaron la Plaza San Pietro y parte de la Via de la Conciliación. La respuesta de los jóvenes es semejante, por los números y por el entusiasmo, a la reunión que tuvo lugar dos años antes, el Año Santo del Jubileo de los jóvenes de 1983, cuando el Santo Padre se reunió en Roma con sus amados jóvenes en un encuentro para la oración, para compartir, para conversar alegremente.

El éxito de estas iniciativas hizo que naciera la idea de instituir las Jornadas Mundiales de la Juventud (JMJ), en las que los jóvenes de todo el mundo pueden encontrarse con el Santo Padre y, con él, renovar la propia fe. Las jornadas fueron concebidas por Juan Pablo II «como momentos de descanso en los que es posible alimentar la fe mediante el encuentro con los coetáneos de otros países y para compartir las respectivas experiencias».

De esta manera empezó la tradición anual de las JMJ en las diócesis del mundo y del encuentro internacional cada  dos años en un lugar diferente. Este encuentro internacional bianual marca, según las intenciones del Papa, un momento privilegiado en el que los jóvenes pueden «construir puentes de fraternidad y de esperanza entre los continentes y volverse peregrinos por los caminos del mundo». 

El primer encuentro internacional (que coincidió con la segunda JMJ) fue en Buenos Aires, en 1987. Así, «todo nace de una gran intuición de Karol Wojtyla y que confirma Joseph Raztinger», sintetiza “Familia Cristiana».