UN LIBRO-DENUNCIA SOBRE LOS PROYECTOS SOCIALES DEL GOBIERNO DE ZAPATERO
La conjura contra la vida: eugenesia y eutanasia, lo que viene después de la ley del aborto
Manuel Cruz – 07/12/2009
Guillermo Buhigas Arizcun, un profesional de los medios de comunicación –es productor, realizador y guionista de cine- lleva varios años dedicado a la investigación y análisis de lo que el Papa Juan Pablo II denunció como “la conjura contra la vida”. Fruto de este trabajo ha sido la publicación de un libro («Eugenesia y eutanasia: la conjura contra la vida») editado por Sekotia, especializada en temas de bioética, en el que denuncia las mentiras históricas impuestas por lo políticamente correcto y que fue presentado ayer a la prensa.
– Las denuncias de su libro son realmente tremendas; tanto que pueden parecer incluso increíbles, como esa “sopa fetal” que se consume en algunos restaurantes de China; los infanticidios de deficientes mentales considerados “no aptos” para la sociedad…
– Puede que sea así pero son rigurosamente ciertas. Cuando el Papa Juan Pablo II denunciaba la “conjura contra la vida” sabía perfectamente lo que se decía y yo me he dedicado a investigar todo lo que hay detrás de aquella denuncia en la que el Papa afirmaba que en esa conjura están implicadas instituciones internacionales dedicadas a alentar y programar campañas de difusión de la anticoncepción, la esterilización y el aborto.
– Por ejemplo…
– Sin ir más lejos: Bill Gates, la persona más rica del mundo y que se ha forjado una imagen de benefactor de la humanidad con sus donaciones “filantrópicas”, tiene sus mayores ingresos de la empresa que fabrica la Píldora del Día Después… Pero ahí están los Rockefeller, algunos premios Nobel como Lucien Monod, la Unesco, la IPPF (Federación Internacional de Planificación de la Familia), la Institución Carnegie, asociaciones médicas, universidades y otros destacados darwinistas que se disfrazan de filántropos. En esa larga nómina hay que incluir a presidentes norteamericanos que han pasado a la historia como “grandes hombres”, entre ellos Theodore Roosevelt, el genocida de los indígenas norteamericanos, que afirmó antes de ser elegido que “la sociedad no debe permitir que los degenerados se reproduzcan”. Sin olvidar a Winston Churchill, que describo en el libro como un maníaco depresivo y racista, y que ya propuso esterilizar a cien mil “degenerados mentales” y enviar a otros tantos a campos de concentración “para salvar la raza británica de la decadencia…
– Todo eso ha quedado más o menos oculto durante décadas… Ahora nos encontramos con el aborto. ¿Qué nos viene después?
– La eugenesia y la eutanasia.
– Explíquese.
– Estamos en el desarrollo de la cultura de la muerte, que ya tiene un largo período de gestación, en particular desde Darwin y sus discípulos, como Francis Galton, que era primo suyo, y Nietzsche. El objetivo de esta «cultura» es controlar la tasa de natalidad de los “no aptos”, que deben ser condenados a desaparecer prematuramente para mejorar así la raza humana.
– Pero eso es puro nazismo
– En efecto. Los nazis, en su momento, se consideraban a sí mismos como alemanes cultos, la gran avanzadilla del progreso humano. Fueron los principales practicantes de la eugenesia, término inventado por el masón Galton basándose en las teorías de la evolución y de la selección de las especies de su primo Darwin. Los nazis, además, no estaban solos en sus políticas eugenésicas, practicadas ya en otras naciones. Uno de los carteles de la propaganda nazi rezaba justamente así: “No estamos solos”. Después de la guerra, ante el horror del holocausto, se guardó un “prudente” silencio sobre la eugenesia. Pero ahora vuelve con fuerza, traída de las manos de los “progresistas”, con el engaño de que debemos cuidar de la calidad de vida…
– ¿Pero en qué cabeza humana cabe que puedan practicarse infanticidios, como en la prehistoria?…
– Pues, por imposible que parezca, cabe en la cabeza de los progres de hoy, muchos de los cuales hablan con unción de paralizar el cambio climático y de preservar el medio ambiente. Ahí tenemos el aborto libre como una “conquista” social, aunque estoy convencido de que, incluso con la nefanda ley de Zapatero aprobada por el Congreso, la batalla de la opinión pública la está ganando la defensa de la vida y de la dignidad humana. De todas formas, la propaganda oficial -¡tan parecida a la de los adelantados nazis!- nos trata de vender la idea de que el cigoto y el embrión humano no son seres humanos aunque estén vivos… De momento, si ya podemos matar como un derecho a un feto de catorce semanas, no cuesta nada imaginar que pronto podrán matarse a los niños con deficiencias para ahorrar costes a la Sanidad pública. Igual ocurrirá con los ancianos. Tengo el convencimiento de que el caso del Dr. Montes no es un caso aislado y que muchos ancianos y también paralíticos, mueren por sedación masiva para ahorrar costes y eventuales sufrimientos a los familiares. El caso descrito en la película “Mar adentro” sobre el suicidio asistido de un tetrapléjico, es una descarada propaganda de la eutanasia, aplaudida por el mundo progresista…
– ¿Y todo eso será acogido con pasividad por la sociedad?
– Existe una clarísima metodología para imponer la eutanasia, una estrategia de marketing social destinada a que los ingenuos se la traguen por la vía del sentimentalismo. Por ejemplo, hay que buscar casos lacrimógenos para exponerlos públicamente; cuando se conozcan bien, se practica una transgresión de la ley –es el caso de “Mar adentro”- a la que, igualmente, se le da toda la publicidad posible, como ya ocurrió con las practicas del Dr. Montes. Después se busca un enemigo para demonizarlo y ridiculizarlo. El paso siguiente es difundir la eutanasia como una “realidad social” y exigir al legislador que la regule. Por último, basta con interpretar la ley cada vez más laxamente para llegar al un uso generalizado de la eutanasia. Todo está previsto, como estamos viendo con el aborto.
– Tremendo… ¿qué hacer?
– Estar alerta, no dormirnos, rezar… Tenemos a Cristo, a la Iglesia contra la cual no prevalecerán las puertas del Infierno y que ha sido la gran defensora de la vida y de la dignidad humana desde su nacimiento hace dos mil años. Nunca hay que perder la esperanza.
–PARA SABER MAS———————————————–
Derecho al aborto y eugenesia privada Aceprensa – José Miguel Serrano Ruiz-Calderón – 25/02/2004 |