Mueren mujeres por Misoprostol

Mueren mujeres por Misoprostol recomendado por la IPPF – VHI

Fuente: http://familiasporlafamilia.blogspot.com/

La recomendación de Paternidad Planificada de usar Misoprostol (Cytotec) de forma vaginal, en vez de oral, para abortar, ha causado infecciones mortales en varias mujeres, según un estudio de la Universidad de Michigan [1].

Paternidad Planificada es la asociación miembro en EEUU de la rama occidental de la Federación Internacional de Planificación de la Familia (IPPF, por sus siglas en inglés). La IPPF es la federación de organizaciones no gubernamentales (ONGs) más abortista del mundo [2].

Hasta el 2006, Paternidad Planificada les decía a las mujeres que tomaran los fármacos Misoprostol y Mifepristone (RU 486) vaginalmente. Ello tuvo lugar a pesar de que la agencia del gobierno de EEUU que regula la producción y venta de fármacos y alimentos (FDA, por sus siglas en inglés), estipulaba en su protocolo que estos fármacos deben ser tomados oralmente. Pero cuando murieron cinco pacientes por haber usado Misoprostol de manera vaginal, entonces Paternidad Planificada, de forma callada y sin admitir responsabilidad alguna, cambió su recomendación y se ajustó al protocolo de la FDA [1].

En realidad Misoprostol sólo debe usarse para reducir el ácido estomacal en pacientes que están tomando medicinas para tratar la artritis, que a su vez inhiben las sustancias protectoras del estómago [3].

Pero los fanáticos del aborto utilizan Misoprostol, que es una potente prostaglandina, como seguimiento al uso de la píldora abortiva Mifepristone. Mientras Mifepristone mata al bebé no nacido, Misoprostol se encarga de expulsarlo de su madre, causando fuertes contracciones en el útero. Este uso abortivo de estos dos fármacos de forma oral y en el orden apenas descrito es el que ha sido aprobado por la FDA, para matar bebés no nacidos de esa manera [1].

Más terrible todavía es el hecho de que en América Latina, no pocas mujeres están cometiendo la locura de adquirir el peligrosísimo Misoprostol ilegalmente por Internet, para ingerirlo con el propósito de abortar [4].
En el caso de EEUU, los investigadores de la Universidad de Michigan han encontrado que Misoprostol, al ser usado para abortar, puede permitir que la bacteria Clostridium sordelli, la cual normalmente no constituye una amenaza, cause una infección mortal cuando se usa vaginalmente [1].

Jim Sedlak, vicepresidente de la American Life League (Liga Provida de EEUU, http://www.all.org), expresó: «Este estudio nos muestra que Paternidad Planificada no sólo no valora la vida de los bebés por nacer, sino tampoco la de sus mamás» [1].

Notas:

[1]. «Planned Parenthood’s Stealthy Practices Lead to Death», PharmFacts E-News Update, 19 de junio del 2008, http://www.all.org/article.php?id=11449.
[2]. Para obtener más información acerca de la IPPF y de Paternidad Planificada, visite, en el portal de VHI, http://www.vidahumana.org, el siguiente enlace: http://www.vidahumana.org/vidafam/ippf/ippf_index.html.
[3]. Judie Brown, «Ratting on Planned Parenthood», Pro-Life Today, 19 de junio del 2008, http://www.all.org.
[4]. Para obtener más información acerca del Misoprostol y de la RU 486, visite, en el portal de VHI: http://www.vidahumana.org/vidafam/aborto/aborto-quimico_index.html.

Llamar las cosas por su nombre

Llamar las cosas por su nombre, la «píldora del día después» – VHI

Por la Dra. María Concepción Morales
Presidente de Pro-Vida Cuba

La lengua española es bella y rica en contenido, pero algunos la usan para quitarle el verdadero significado a las cosas y eso se está dando, sobre todo, en torno a las nuevas vidas humanas.

Desde hace años se habla de «ponerse un anticonceptivo», cuando se trata de que a una mujer se le inserte un dispositivo intrauterino (DIU), como son el asa, la T de cobre, y la medusa. Estos artefactos no actúan como anticonceptivos sino como anti-implantatorios o microabortivos.

Se dice también que una mujer se hace una «regulación menstrual», cuando lo que se le ha practicado es un aborto por aspiración.

Se habla de «ponerse una pastilla», cuando se practica un aborto químico con un producto que fue hecho para las úlceras gastroduodenales y la gastritis. El producto en cuestión se llama Misorpostol o Cytotec. Este fármaco hace que el niño sea expulsado del vientre materno independientemente del tiempo del embarazo. En algunos países se vende sin receta médica, y se les enseña a las mujeres a administrárselo ellas mismas para que aborten. También se les enseña a que ellas, a su vez, enseñen a otras a abortar cada vez que lo consideren oportuno, sin medir las consecuencias que tiene sobre el bebé, que es quitarle la vida, y sobre la salud de la mujer, a veces fatales.

El último «grito de la moda» es la «píldora del día después» (PDD). También se le llama «anticoncepción de emergencia», porque tomada después del acto sexual es capaz de evitar el nacimiento de un niño. En realidad, se trata de una tableta de hormonas que depende del momento del ciclo menstrual en que se tome, para que actúe como anticonceptivo o como abortivo. Además, al tener una cantidad enorme de hormonas, le producen serios daños a la salud de la mujer que la ingiere.

Para saber cómo actúa este mal llamado «anticonceptivo», vamos a ver cómo se produce la concepción. Para que se produzca la concepción o fertilización en los seres humanos, son necesarias dos células, una femenina, el ovocito, y la otra masculina, el espermatozoide.

Todo hombre sano es capaz de fertilizar a una mujer cualquier día del mes. En cada eyaculación el hombre deposita unos 300 millones de espermatozoides en la esposa. Si las condiciones son buenas, un buen número de esos espermatozoides mantiene su vitalidad durante 5 días. Sólo uno de ellos es necesario para que comience la vida de un nuevo ser humano.

En la vida reproductiva de una mujer, desde aproximadamente los 12 a los 45 años, maduran unos 400 ovocitos. Salvo excepciones, sólo uno es expulsado cada mes por el ovario y captado por la trompa donde mantiene su vitalidad por unas 24 horas.

Al mismo tiempo de la maduración de un ovocito, se producen una serie de cambios en el cuerpo de la mujer inducidos por hormonas producidas durante su ciclo, que dura alrededor de un mes. Durante la primera mitad del ciclo, el ovocito va madurando y al final de esa primera mitad es expulsado del ovario. Al mismo tiempo, se producen cambios en la capa interna del útero o endometrio, que es el nido donde el recién concebido vivirá nueve meses. En la segunda mitad, este nido se termina de preparar para acoger al niño por nacer.

Si la PDD es tomada en los días antes de que el ovocito sea expulsado del ovario, se retarda este proceso y entonces no se puede encontrar con el espermatozoide ni producirse la concepción. Pero si se toma el día o los días después de la ovulación, ya habrá comenzado una nueva vida humana. En ese caso, la acción de la píldora será sobre el endometrio, haciendo que no pueda recibir y acoger al nuevo ser humano, que debe llegar a instalarse 6 días después de la fertilización y, por consiguiente, es abortado. A la vez, la PDD afecta el movimiento normal de la trompa, que es el canal por el cual el ser recién concebido llegará al nido, haciendo que llegue cuando este último no tiene la capacidad adecuada para recibirlo, por lo cual también será abortado.

En resumen, la PDD tiene un mecanismo de acción anticonceptivo cuando retarda la ovulación, y abortivo cuando interfiere con el movimiento de la trompa y el normal desarrollo del endometrio.
Los que promueve la PDD indican que ésta se tome en las primeras 72 horas después de un coito «no protegido». Pero la mayoría de las mujeres no saben en qué momento de su ciclo se encuentran. Es decir, no saben si ya se produjo o se va a producir la ovulación. Es como jugar a la ruleta rusa, no saben cuándo se están sometiendo a una anticoncepción o a un aborto.

Además de matar al recién concebido, la PDD tiene efectos muy negativos en la salud de la mujer. Ello se debe a que la PDD tiene una cantidad enorme de la hormona Levonorgestrel (0.75 mgs), veinte veces más que una píldora anticonceptiva convencional, que puede dar nauseas, vómitos, aumento de la sensibilidad de las mamas, irregularidad en los ciclos menstruales, desequilibrios hormonales, infertilidad, etc. Al ser un producto de un reciente uso, no se sabe qué trastornos puedan dar a largo plazo a quien lo tome.

Este producto puede dar lugar a que aumenten las relaciones sexuales en adolescentes y jóvenes, al banalizarse las mismas y sus consecuencias. Por tanto, puede dar lugar también a que aumenten las Enfermedades de Transmisión Sexual (ETS). Algunas ETS son curables, pero otras no, como el papiloma virus, que puede llevar al cáncer del cuello uterino, o el virus de inmunodeficiencia humana -HIV- que tiene fatales consecuencias.

Pero la peor consecuencia es que cuando los adolescentes y jóvenes practican el coito sin AMOR, sólo por satisfacer un instinto, van entregando en cada relación parte de sí. Es como si se tomara una rosa y cada uno le arrancara un pétalo. Al final no queda nada. El ser humano pierde su capacidad de amar, que es lo peor que le puede pasar a una persona.

Es necesario que llamemos a las cosas por su nombre, y que se les informe a las mujeres sobre las reales consecuencias para su vida y su salud de los productos que están usando. Al disponer de tan fáciles productos, que evitan el nacimiento de sus hijos, se están convirtiendo en muchos casos en objeto de placer. Es necesario valorar también las perniciosas consecuencias que tiene todo ello para el equilibrio demográfico.

«Sexo en Nueva York»

«Sexo en Nueva York»: A la liberación por la VISA

Fuente: Aceprensa.com
 
25 Junio 2008

Cuatro mujeres adultas, liberadas de compromisos, desinhibidas en lo sexual… y absolutamente esclavizadas por la dictadura de la imagen y el poder de las marcas. Si Simone de Beauvoir resucitara y viera los resultados en taquilla de la película Sexo en Nueva York, volvería deprimida a su tumba. Afortunadamente, la autora de El segundo sexo no ha tenido que contemplar las oleadas de público -sobre todo femenino- que acudía en masa al estreno de una cinta que -al igual que la serie en la que se inspira- recoge una visión de la mujer situada en las antípodas de cualquier tipo de feminismo.

Escena pelicula \Mientras tantas personas han luchado y siguen luchando para hacer entender al mundo que la dignidad del hombre y la mujer es la misma y, por lo tanto, deben ser iguales sus derechos y deberes, las protagonistas de Sexo en Nueva York se muestran más preocupadas por los efectos del Botox.

Parece que para ellas, la lucha terminó en cuanto adquirieron una tarjeta de crédito para fundir. Una vez conseguida, los graves problemas a los que se enfrentan son dónde meter varias decenas de pares de zapatos, cómo enfrentarse a la mudanza del guardarropa, dónde beber el mejor cóctel o cómo disimular las patas de gallo (los michelines no entran en la categoría de problema sino directamente en la de drama, y me remito a la película).

A las protagonistas de la cinta no les interesa la política, ni tampoco les quita el sueño sus derechos y deberes, no se las ve leyendo un libro (como mucho hojean revistas) y, aunque se supone que trabajan, no hablan jamás de temas profesionales (en realidad, de lo único que hablan es de ropa y de hombres, y de esto último como camioneros, quizás sea por lo de la igualdad).

La única liberación que conocen les viene por la vía del consumo: ante un desplante, una enfermedad o una dificultad, compran. Y la propia película se convierte así en un enorme catálogo publicitario: coches, vestidos, muebles de diseño, zapatos, accesorios, viajes y hoteles. Una revista de 140 minutos con cientos de anuncios adosados en forma de fotogramas. Todo lo que una persona necesita para ser feliz o al menos para no pensar (que en la película parecen sinónimos). En definitiva, el encumbramiento de la frivolidad. Y la paradoja de convertir una de las más feroces y patentes tiranías -la del consumismo compulsivo- en símbolo de liberación.

Por supuesto, ante este planteamiento, la industria de la moda y el lujo se frota las manos. La lucha por la cultura, por los derechos, por la conciliación no da excesivo dinero, pero la competición brutal de las marcas, la carrera desenfrenada por envejecer sin arrugas, la olimpiada para adquirir el mejor ático o el deportivo más moderno reportan beneficios, y muchos.

Y la prueba es el aluvión de marcas que se han sumado a la película. Por ejemplo, uno de los personajes abandonará su cóctel favorito para beber vodka Skyy, una de las marcas que han llegado a un acuerdo con la productora New Line Cinema para promocionarse mutuamente. Contratos parecidos han firmado Bag Borrow or Steal (bolsos y joyas), Coty (perfumes), Glacéau Vitaminwater (agua perteneciente a Coca-Cola) y Mercedes-Benz. Estas marcas son las verdaderas protagonistas de la película. Ellas y los 300 vestidos que Patricia Field elaboró para la película (de paso ha lanzado una página web donde vende los artículos de la cinta en formato low cost).

La protagonista y coproductora de la película, Sarah Jessica Parker, sostenía hace unos días que Sexo en Nueva York haría historia en el cine. Lo dudo. Igual que dudo que contribuya a mejorar un ápice la situación de las mujeres, que, vistas en este espejo, acaban deformadas. Otra cosa es que haga historia enterrando bajo kilos de frivolidad cualquier pensamiento serio sobre el papel de la mujer en la sociedad.

«Ejemplo de santificación en la vida ordinaria»

domingo, 29 de junio de 2008

OpusDei.es


El cardenal Camillo Ruini, Vicario del Papa para la Diócesis de Roma, ha presidido la sesión de clausura del proceso diocesano sobre la vida y las virtudes de Monseñor Álvaro del Portillo (1914-1984), Prelado de Opus Dei.

El acto ha tenido lugar en el palacio del Laterano un 26 de junio, memoria litúrgica de San Josemaría Escrivá de Balaguer, de quien Álvaro del Portillo fue el primer sucesor al frente del Opus Dei.

En la ceremonia estaban presentes el actual Prelado, Monseñor Javier Echevarría, y numerosos fieles del Opus Dei, además de amigos de Mons. del Portillo, que vivió en Roma casi cincuenta años, desde 1946 hasta su muerte en 1994.

Como ha dichoAlmudi.org - San Josemar�a con D. Álvaro el cardenal Ruini, «en su momento S.E.R. Mons. Javier Echevarría, aunque había sido reconocido por la Congregación para las Causas de los Santos como el Obispo competente para instruir la causa de su predecesor, por un delicado y riguroso sentido del derecho quiso que yo nombrara un Tribunal del Vicariato para escuchar su deposición y las de algunos otros testigos».

«Accedí con placer a su petición -ha continuado-, en virtud de lo cual me encuentro hoy aquí clausurando formalmente la investigación procesal para, sucesivamente, entregar las actas a la Congregación para las Causas de los Santos: como es sabido, los Tribunales diocesanos tienen una función meramente instructora, pues la única instancia judicial es la Congregación».

En sus palabras, el cardenal Ruini ha incluido algún recuerdo personal: «No olvidaré el afecto de don Álvaro cuando venía a visitarme al vicariato. Dejaba siempre un recuerdo y testimonio de su dedicación a Cristo».

El proceso de canonización de Álvaro del Portillo se abrió hace cuatro años, el 5 de marzo de 2004, y se ha desarrollado, en esta primera fase, en dos tribunales, uno del Vicariato de Roma y otro de la Prelatura del Opus Dei.

Este último aún no ha terminado sus trabajos. Algunos testigos, además, han sido escuchados por otros tribunales, en sus propias diócesis, en régimen de comisión rogatoria.

Álvaro del Portillo nació en Madrid el 11 de marzo de 1914. «El 7 de julio de 1935, siendo todavía estudiante de ingeniería -ha recordado el cardenal Ruini en su discurso- pidió la admisión en el Opus Dei. Tras los trágicos sucesos de la guerra civil española, permaneció junto al Fundador como su colaborador más estrecho. El 25 de junio de 1944 recibió la ordenación sacerdotal: fue uno de los tres primeros sacerdotes del Opus Dei (…)».

«En 1946 se trasladó a Roma, donde desempeñó varios encargos al servicio de la Santa Sede: desde Consultor de diferentes dicasterios hasta Secretario de la Comisión conciliar que elaboraría el decreto Presibyterorum Ordinis. En 1975, tras la muerte de San Josemaría, fue llamado a sucederle al frente del Opus Dei».

Murió en Roma, al regreso de un viaje a Tierra Santa, el 23 de marzo de 1994. El Papa Juan Pablo II, que tres años antes le había conferido la dignidad episcopal, acudió esa tarde a la capilla ardiente, en la iglesia prelaticia del Opus Dei, dedicada a Santa María de la Paz. Sus restos descansan ahora en la cripta de esa misma iglesia, en Roma.

El cardenal Ruini ha dicho que Monseñor Álvaro del Portillo fue «un ejemplo de fidelidad en el seguimiento del espíritu de santificación en el trabajo y en la vida ordinaria», que había aprendido directamente de San Josemaría, y ha concluido implorando a la Virgen que su ejemplo sea un estímulo para «contagiar el amor a Dios y al prójimo a muchas personas».

Por su parte, el sucesor de don Álvaro como Prelado del Opus Dei, Mons. Javier Echevarría, ha dicho que éste «es sólo un primer paso, pero un paso que nos llena de alegría, pues vemos en el queridísimo don Álvaro el hombre íntegro, el cristiano auténtico, el buen pastor, el hijo fidelísimo de San Josemaría».

Mons. Flavio Capucci, postulador de la Causa, ha recordado que en 1978, cuando comenzó el proceso de san Josemaría, Mons. Álvaro del Portillo insistió en que, al pedir al Papa el inicio de la causa del Fundador, el Opus Dei no buscaba su propia gloria, sino la de la Iglesia. «Hoy -ha dicho Capucci- con todo el corazón hacemos nuestras esas palabras».

El próximo paso del proceso, una vez que el tribunal de la Prelatura del Opus Dei concluya sus sesiones, será la elaboración de la positio, una biografía del candidato a los altares que debe demostrar que éste ha vivido en grado heroico las virtudes cristianas.

La positio ha de ser presentada por el postulador de la causa de canonización: en el caso de Álvaro del Portillo, el postulador es Monseñor Flavio Capucci.

La positio es enviada luego a la Congregación para las Causas de los Santos para que la estudie y emita su dictamen.

San Pablo es Maestro de Fe y Verdad para gente de hoy

Vaticano

San Pablo es Maestro de Fe y Verdad para gente de hoy, dice el Papa al inaugurar Año Paulino  

VATICANO, 28 Jun. 08 / 01:57 pm (ACI).- Al inaugurar hoy el Año Paulino en las Vísperas de la Solemnidad de San Pedro y San Pablo, el Papa Benedicto XVI destacó que el Apóstol es Maestro de Fe y Verdad de las gentes de hoy; y que su labor evangelizadora estuvo centrada en el amor a Cristo y la verdadera libertad que se presentan ejemplares para todas las generaciones.

Al iniciar su discurso en la Basílica de San Pablo de Extramuros, el Santo Padre recuerda al gran Apóstol, como » ‘Maestro de las gentes’: estas palabras se abren al futuro, hacia todos los pueblos y generaciones. Pablo no es para nosotros una figura del pasado, que recordamos con veneración. Es también nuestro maestro, apóstol y heraldo de Jesucristo también para nosotros«.

Luego de explicar que este Año Paulino debe servir para escuchar y aprender de San Pablo, «‘la fe y la verdad’, en las que están enraizadas las razones de la unidad entre los discípulos de Cristo», el Papa destacó que ha querido «prender, para este bimilenario del nacimiento del Apóstol, una especial ‘Flama Paulina’, que permanecerá encendida durante todo el año en un brasero especial colocado en el cuadripórtico de la Basílica».

«En la Carta a los Gálatas», San Pablo «nos ha dado una profesión de fe muy personal, en la que abre su corazón a los lectores de todos los tiempos y revela la más íntima primavera de su vida. ‘Vivo en la fe del Hijo de Dios, que me ha amado y se ha dado a sí mismo por mí’. Todo lo que Pablo hace, parte de este centro. Su fe es la experiencia del ser amado por Jesucristo en modo personal, es la conciencia del hecho que Cristo ha afrontado la muerte no por alguna cosa anónima, sino por amor a él -de Pablo- y que, como Resucitado, lo ama siempre, por lo que se ha donado por él. Su fue está en haber sido remecido por el amor de Jesucristo, un amor que lo lleva hasta lo íntimo y lo transforma», explicó el Pontífice.

«Su fe no es una teoría, una opinión sobre Dios y el mundo. Su fe es el impacto del amor de Dios en su corazón. Y así esta misma fe y amor por Jesucristo», precisó.

Tras señalar que la verdad era para el Apóstol «demasiado grande para estar dispuesto a sacrificarla en vista de un éxito externo» y que ésta «que había experimentado en el encuentro con el Resucitado bien merecía para él la lucha, la persecución, el sufrimiento«, Benedicto XVI destacó que «lo que lo motivaba en lo más profundo era ser amado por Jesucristo y el deseo de transmitir a otros este amor».

«Pablo era capaz de amar, y toda su obra y sufrimiento se explica solo a partir de este centro. Los conceptos fundantes de su anuncio se comprenden únicamente en base a ello. Tomamos entonces una de sus palabras clave: la libertad. La experiencia de ser amado hasta lo profundo por Cristo le había abierto los ojos a la verdad y la existencia humana, pues esta experiencia abrazaba todo. Pablo era libre como hombre amado por Dios que, en virtud de Dios, estaba en capacidad de amar junto con Él. Este amor es entonces la ‘ley’ de su vida así como lo es la libertad en su vida. Él habla y actúa movido por la responsabilidad del amor. Libertad y responsabilidad están aquí unidas de modo indivisible. Porque está en la responsabilidad del amor, él que es libre, porque es alguien que ama, él vive totalmente en la responsabilidad de este amor y no toma la libertad como pretexto para ser arbitrario o para el egoísmo».

«En el mismo espíritu (San) Agustín ha formulado la frase famosa: Dilige et quod vis fac (Ama y haz lo que quieras). Quien ama a Cristo como lo ha amado Pablo, puede verdaderamente hacer lo que quiere, porque su amor está unido a la voluntad de Cristo y así a la voluntad de Dios, porque su voluntad está anclada en la verdad y porque su voluntad no es más simplemente voluntad suya, arbitrariedad del yo autónomo, sino que está integrada en la libertad de Dios y de ella recibe el camino por recorrer», añadió.

El Papa también explica luego que San Pablo es ejemplo de cómo «no hay amor sin sufrimiento, sin el sufrimiento de la renuncia a sí mismo, de la transformación y purificación del yo para la verdadera libertad. Allí donde no hay nada que valga la pena para sufrir, también la vida misma pierde su valor«.

Finalmente, Benedicto XVI dijo que «a la luz de todas las cartas de San Pablo, vemos como en su camino de maestro de las gentes se ha cumplido la profecía de Ananías en la hora de la llamada: ‘Yo les mostraré cuánto deberá sufrir por mi nombre’. Su sufrimiento lo hace creíble como maestro de verdad, que no busca el propio orgullo, la propia gloria, la veneración personal, pero se esfuerza por Quien los ha amado y se ha dado a sí mismo por todos nosotros«.

«En esta hora agradecemos al Señor, porque ha llamado a Pablo, haciéndolo luz de las gentes y maestro de todos nosotros, y le rezamos: Danos también hoy testimonios de la resurrección, tocados por tu amor y capaces de llevar la luz del Evangelio en nuestro tiempo. ¡San Pablo, ruega por nosotros! Amén».

DVD sobre noviazgo, matrimonio y educación de los hijos

Conferencias del P. Bojorge

Lanzan en Argentina DVD sobre noviazgo, matrimonio y educación de los hijos

BUENOS AIRES, 28 Jun. 08 / 07:08 pm (ACI).- La Productora San José ha lanzado el primer DVD de una serie de conferencias sobre el noviazgo, el matrimonio y la educación de los hijos, impartidas por el sacerdote jesuita Horacio Bojorge.

Según indican los realizadores en una nota de prensa, este material será de «gran utilidad para catequistas, colegios, pastorales familiares, y fundamentalmente para todos los padres y madres de familia«.

Para ellos, indican, «esta herramienta fundamental» permitirá que las futuras familias «sean lo que nos dice el Papa Juan Pablo II«, es decir «comunidad de vida y amor«.

El P. Bojorge fue ordenado sacerdote en Maastricht, Holanda. Se licenció en Filosofía en Argentina en 1959; en Teología en Holanda en 1966; y en Sagrada Escritura en el Instituto Bíblico en Roma en 1969.

Es «habitual predicador de retiros ignacianos» y «autor de varios libros exitosos, como así también, programas radiales sobre el tema ‘familia y educación de los hijos'».

Para más información puede ingresar a www.productorasanjose.com.ar  o escribir a productorasanjose@gmail.com